Jesús es de todos                           Semana del ECUMENISMO                               22 enero 2012

  1. ACOGIDA
  2. CANTO   UN MILLON DE AMIGOS
  3. INTRODUCCION

El Grupo de preparación de la Eucaristía que celebramos hoy, consideró la oportunidad de abordar el ecumenismo en sus dimensiones Universal y entre cristianos de las distintas iglesias.

La institucionalización de las religiones y de las iglesias y los focos de poder que esto origina, estimamos que es el  mayor obstáculo para que se construya un verdadero ecumenismo. Separan menos que eso  las creencias o increencias de las personas.

En el Evangelio de San Juan, en el Capitulo 17, versículos 21 y 22, se aboga por la unidad: “para que todos sean uno; como tú, Padre, en mi y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros. La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno”.

Jesús es de todos. Esto es lo que proclama ya claramente Pablo: que Jesús no es patrimonio de Israel, sino de la humanidad entera.

La palabra “católico”,  significa “universal”, y sentimos tristeza  al advertir que en este momento significa para muchos, entre los que se cuentan un nutrido grupo de las Autoridades eclesiásticas, todo lo contrario, es decir, una parte, solo una parte, de los seguidores de Jesús.

Universal significa, desde luego, que el mensaje de Jesús es para todo ser humano, y es esta la misión que Jesús encomienda a los suyos: ir por todo el mundo y anunciar a todos la Buena Noticia.

Jesús fue un asiático judío, no un occidental ni un romano. Pero su mensaje no es asiático ni judío, sino universal.

Los mismos magos de Oriente son un signo y una invitación a la universalidad, una llamada a la universalidad que los primeros seguidores de Jesús entendieron con esfuerzo y dolor y llevaron a cabo no sin profundas crisis y desgarros.

Es un tema de urgente examen de conciencia para nosotros la Iglesia católica, apostólica y romana.

En definitiva, el ecumenismo que propone el Evangelio es que estemos abiertos a todas las religiones y a todos los que no profesan ninguna. Que el valor de todos los seres humanos, va implícito en cada uno y es anterior a toda creencia.

4 PERDÓN  Mon Dieu G. Rossini http://www.youtube.com/watch?v=biF8kAsHceE

Dios, Padre y Madre, a pesar de la unidad que recibimos en Cristo, persistimos en nuestra desunión. ¡Ten piedad de nosotros!

Endurecemos nuestros corazones aunque leemos el Evangelio. ¡Ten piedad de nosotros!

No te servimos a través de nuestros hermanos y hermanas. ¡Ten piedad de nosotros!

Al amparo de la legislación española, en el fondo nos sentimos privilegiados ¡Ten piedad de nosotros!

Se nos olvida constantemente el escándalo que surge de la desunión de los cristianos. ¡Ten piedad de nosotros!

Permanecemos totalmente indiferentes a la realidad del resto de los cristianos ¡Ten piedad de nosotros!

5 LECTURAS

a) CORAZÓN CONVERTIDO   Ibn ‘Arabi místico sufí

Hubo un tiempo en que yo rechazaba a mi prójimo > si su religión no era como la mía.

Pero ahora mi corazón se ha convertido > en receptáculo de todas las formas religiosas: > es pradera de gacelas y claustro de monjes cristianos,  templo de ídolos y Kaaba de peregrinos, Tablas de la Ley y Pliegos del Corán. Porque profeso la religión del Amor y voy a donde quiera que vaya su cabalgadura. Porque el Amor es mi credo y mi fe.

La Comunidad de Taizé busca la realización de una “ Parábola de Comunión “

Los hermanos de Taizé no dicen que la comunidad es la comunión eclesial plenamente realizada, sino que se trata de una “parábola”. Parábola de una Iglesia reunida en su diversidad. Parábola, que nos ayuda a recordar que la Iglesia desgarrada sigue siendo la iglesia unida. En lo profundo la Iglesia es UNA, y es por eso la Iglesia indivisa. La unidad, no está por hacer, hay que descubrirla. Esto es lo que ocurre en Taizé, donde hay una parábola del descubrimiento de la unidad, porque en la comunidad se integran personas con orígenes confesionales diferentes, pero que viven juntas porque son cristianas. En Taizé asistimos a una experiencia de Pentecostés.        Roger de Taizé

b) EVANGELIO Bautismo de Jesús (Mt, 3 1-11)

6 REFLEXIÓN  Jennifer Effer  Iglesia  Anglicana

7 OFERTORIO

  • BIBLIA INTERCONFESIONAL

Ofrecemos la Biblia, como palabra revelada de Dios, en donde se encuentran los Evangelios y la figura de Jesús de Nazaret, que nos muestra el camino para concretar el plan salvador de Dios en la Historia.

  • VELA APAGADA Y ENCENDIDA

Presentamos estas velas. Una apagada, como signo del  egoísmo y la prepotencia que muchas veces nos invaden en el acercamiento con nuestros hermanos de otras confesiones religiosas.

Una encendida, Jesucristo es la Luz de Dios y en Él, todos somos hermanos

  • ORACIÓN

Presentamos la oración de cada uno de nosotros en esta Mesa, como muestra de que la verdad es UNA (Jesús) pero su interpretación es patrimonio de todos.

  • En su oración puede pedir a los participantes que expresen su oración.
  • PAN Y VINO

8 ANÁFORA

L. En esta Eucaristía, dedicada a la Unidad de todos los que creemos en  tu Hijo Jesús, queremos unirnos a su misma oración. Éste será el centro de nuestra oración de hoy.

L          Después de la cena con los discípulos, Jesús les había dicho: “Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el viñador. Permaneced unidos a mí, como yo lo estoy a vosotros”. “Yo soy la vid y vosotros los sarmientos. El que permanece unido a mí, produce mucho fruto, porque sin mí nada podéis hacer”.

TODOS. Y nosotros hemos aprendido, como Pedro: “Señor, ¿a dónde iremos?  Tú tienes palabras de vida eterna”.

L          También les había dicho: “Mi mandamiento es éste: Amaos los unos a los otros como yo os he amado. El amor supremo consiste en dar la vida por los amigos. Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando”.

TODOS  Y nosotros no podemos olvidar que también les dijo: “¡ánimo, yo he vencido al mundo!”. Y “Ésta es la victoria que vence al mundo, vuestra fe”.

L.         Más adelante les dijo: “Cuando venga el Abogado que yo os enviaré, demostrará a los que son del mundo dónde hay pecado, dónde un camino hacia la salvación y dónde una condena… Él os guiará para que podáis entender la verdad completa”.

L          Por eso nosotros no dejamos de invocar con el Apocalipsis: ¡Amen! ¡Ven, Señor Jesús! Y que la gracia de Jesús, el Señor, esté con todos. Amen.

L          Jesús seguía orando: “He procurado que te conociesen aquellos que tú sacaste del mundo para confiármelos a mí. Eran tuyos; tú me los confiaste, y han obedecido tu mensaje. Ahora han llegado a comprender que todo lo que me confiaste es tuyo y han aceptado esta enseñanza que tú me diste. Ahora saben con absoluta certeza que yo he venido de ti y han creído que fuiste tú quien me enviaste”.

TODOS  No permitas, Padre-Madre, que se nos debilite esta certeza: que Jesús es nuestro, que Jesús es de todos, que Jesús es el Hombre, Camino, Vida y Verdad para todo hombre y mujer que anda en este mundo.

L.         La oración de Jesús subió de tono: “Yo te ruego por ellos. No te ruego por el mundo, sino por los que tú me confiaste, ya que a ti te pertenecen. Todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío, y en ellos resplandece mi gloria”.

TODOS  ¿Qué no podrá conseguir la oración de Jesús? Él nos incorpora a su vida en el seno de su Padre.

L.         Era una oración de despedida y regreso: “Desde ahora, ya no estaré en el mundo; pero ellos se quedan en el mundo, mientras que yo voy a ti. Protege con tu poder, Padre santo, a los que me has confiado, para que vivan unidos, como tú y yo somos uno”.

TODOS   Enséñanos, Padre, este profundo misterio de unidad y comunión, que anida en lo divino y penetra en nuestra humanidad.

L.         Jesús seguía: “Haz que sean completamente tuyos por medio de la verdad; tu mensaje es la verdad. Yo los he enviado al mundo, como tú me enviaste a mí. Por ellos yo me consagro a ti, para que también ellos te sean totalmente consagrados por medio de la verdad”.

TODOS          Nos envías, Padre, y nos dejas en este mundo, sin dejar de ser tuyos, con la misma misión de Jesús, fortalecidos con la verdad de su vida.

L.         “Y no te ruego sólo por ellos; te ruego también por todos los que han de creer en mí por medio de su mensaje. Te pido que todos vivan unidos, Padre, como tú estás en mí y yo en ti, que también ellos estén unidos a nosotros. De este modo, el mundo podrá creer que tú me has enviado”.             (Silencio)

L.         “Yo les he dado a ellos la gloria que tú me diste a mí, de manera que sean uno, como lo somos nosotros. Yo en ellos y tú en mí, para que lleguen a la unión perfecta; así el mundo reconocerá que tú me has enviado y que los amas a ellos como me amas a mí”.    (Silencio)

L.         “Padre, es mi deseo que todos estos que tú me has confiado lleguen a estar conmigo donde esté yo, para que gocen contemplando mi gloria, la gloria que tú me diste, porque ya me amabas antes que el mundo existiese”.    (Silencio)

L.         Antes de esta larga oración, Jesús había expresado simbólicamente la entrega de su vida. Fue un rito común de comida de pan y de vino. El cuerpo y la sangre, en su muerte real, serán ya el alimento, promesa de resurrección.

TODOS   Ya nunca  olvidaremos que nos encargó recordarle en este gesto, que  trasciende todas las palabras. Cogió un trozo de pan y lo repartió diciendo: “TOMAD Y COMED, ÉSTE ES MI CUERPO QUE SERÁ ENTREGADO POR TODOS VOSOTROS.”

Levantó una copa de vino y les invitó a beber de ella: TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL, PORQUE ESTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE QUE SERÁ DERRAMADA POR TODA LA HUMANIDAD. HACED ESTO EN MEMORIA MÍA

L.         Luego, Jesús terminó su oración: “Padre justo, el mundo no te ha conocido; pero yo te conozco, y todos estos han llegado a conocer que tú me has enviado. Les he dado a conocer quién eres, y continuaré dándoselo a conocer, para que el amor que tú me tienes esté también en ellos y para que yo mismo esté en ellos”.

TODOS   Así sabemos que Anunciamos tu muerte y Proclamamos tu Resurrección hasta que vengas para reunir a los tuyos, que somos todos, en la casa del Padre.

L.        La oración del Padre Nuestro es y será para siempre la oración de la Humanidad, llamada a ser hermana, obligada a hacerse cada día más hermana desde el deseo del Padre-Madre y desde el deseo del Hermano Mayor.

TODOS                      PADRE  NUESTRO…..

L.         Y la paz verdadera; la paz que sólo crece en la construcción de la justicia, de la igualdad y de la solidaridad, que nacen del amor, estarán siempre con nosotros.   Nos damos la paz.

9 Comunión, MÚSICA

10 GRACIAS

Gracias Señor porque hemos presentido que tenemos nuevos retos en nuestro camino hacia ti.

Gracias Señor porque nos ayudas a comprender que tu presencia  se reparte por igual, entre todos aquellos que tienen formas muy distintas de entender tu relación con la humanidad.

Gracias Señor porque, con tu ayuda, podremos entender mejor que la comunión entre distintas religiones se debe forjar con la misma naturalidad con la que se construye una comunidad de amigos.

Gracias Señor por hacernos sentir la nostalgia de que estamos muy lejos de compartir el sentido profundo de otras religiones,   repudiadas en nuestro entorno.

Gracias Señor porque en esta comunidad de Santa Tomás de Aquino apostamos hoy por una puesta en común  con los valores de otros muchos ciudadanos del mundo, que también anhelan tu presencia en un planeta radicalmente más justo.

11 CANCIÓN FINAL    HIMNO DE LA ALEGRÍA