Celebración del 25 Aniversario del Hermanamiento entre la Fundación Pueblo indio del Ecuador y la comunidad de Santo Tomás
Domingo 22 de junio del 2025
Hora: 12:00 hora de Ecuador por medio de la plataforma de zoom /19:00 hora de España
Cuidar la Casa Común es custodiar todas las vidas
- Introducción: Video Madre Tierra
Palabras de Nidia
Hermanas y hermanos entrañables, celebramos con gozo y esperanza esta eucaristía en la que desde la fe y el amor nos unimos aquí y allá, para reforzar nuestro hermanamiento, el sueño, la utopía común que nos apremia: la construcción del Reino, la construcción del Sumak Kawsay.
“En nombre de Dios pido que protejamos la casa común” sabiamente clama el Papa Francisco, me atrevo a parafrasearlo: En nombre de Dios, pido que protejamos la vida de las naciones indígenas, porque ellos son los guardianes sin relevo de todas las vidas, en nuestra casa común. De forma milenaria en simbiosis admirable con la Pachamama, con sabiduría y amor han venido cuidando y protegiendo las selvas, los páramos, el agua, las especies, LA VIDA. Sin embargo, desde hace más de 530 años fueron asaltados, y desde hace más de 195 años que nació nuestro Ecuador como república, continúan siendo al interior del Estado Ecuatoriano discriminadas, saqueados y aún no considerados como iguales en derechos.
Y es que la primera constitución de 1830 fue escrita no sólo de espaldas a las naciones indígenas, sino en su contra. Como la mayoría de la población indígena era “analfabeta” y sin dinero… no tenían derecho alguno… ni siquiera el de participar en las elecciones. Las 17 subsiguientes constituciones mantuvieron los mismos principios y normas… Sin embargo, la resistencia nunca se detuvo. A lo largo de los años se dieron sucesivos levantamientos y acciones de rebeldía especialmente contra la explotación y por la tierra que es vida; por supuesto todos fueron reprimidos a sangre y fuego, por las llamadas fuerzas del orden. “Debajo del campo verde, mucha sangre hay en la tierra” dice el poeta Adoum… y es que en cada “sublevación” se dieron masacres y ejecuciones según ellos “ejemplarizadoras”.
En el 2008 aprobamos la décimo novena constitución que es garantista y en ella -gracias a la lucha y resistencia- se logró que Ecuador sea declarado Estado Plurinacional y se incluyeran los derechos colectivos. Sin embargo, han pasado ya 17 años y esta revolucionaria declaración es letra muerta, la realidad del Estado monista no ha cambiado absolutamente nada… ningún derecho es garantizado, ningún territorio está bajo la autoridad indígena, la Asamblea Nacional se integra por medio de candidatos por partidos políticos y no hay una bancada indígena integrada por delegados de pueblos y nacionalidades, elegidos desde sus usos y costumbres.
Con la presencia de gobiernos netamente neoliberales La realidad se empeora. Desde 1830, hasta el sol de hoy, todo gobierno ha mantenido políticas extractivistas que desterritorializan las naciones indígenas; tampoco se realiza la consulta previa, libre e informada; no se garantiza ningún derecho, la Educación Intercultural Bilingüe es una quimera, y las lenguas maternas siguen siendo minorizadas.
Para nosotros las naciones originarias son LA LUZ del mundo que hay que ponerla en un candelabro y LA SAL que -desde su civilización- da sabor a esta civilización occidental, neocolonial, modernizante, decadente.
(Bahá´ u´ lláh) nos dice “No nos miremos como extraños los unos a los otros, somos los frutos de un solo árbol y las hojas de una sola rama, la tierra es un solo país, y la humanidad sus ciudadanos”
- Primera Lectura:
(Del libro “Os ruego en nombre de Dios. Por un futuro de esperanza”, del papa Francisco)
“En nombre de Dios pido que protejamos la casa común” Nuestro planeta está en peligro. Hemos vivido los últimos decenios bajo un sistema voraz, que no sólo empujó a los márgenes del descarte a millones de seres humanos, sino que ha expuesto a límites nunca antes vistos a nuestra, casa común, la Madre Tierra.
Un paradigma socioeconómico edificado sobre la base de la avidez y de la codicia ha necesitado también depredar la naturaleza para sostener el ritmo de consumo y despilfarro que le es inherente. Un desenfreno consumista para unos pocos, que sólo ha sido posible a través del descarte de muchos otros y con agresiones al ambiente que corren el riesgo de ser irreparables. En nombre de Dios pido que defendamos y protejamos la casa común. El reloj apremia, la vida corre peligro, pero estamos a tiempo. Hago mío el slogan de algunas de las múltiples y maravillosas manifestaciones juveniles contra este modelo de depredación: “No hay planeta B”.
Quiero también pedirles a las grandes corporaciones mineras, petroleras, forestales, inmobiliarias, y de agronegocios que dejen de destruir los bosques, humedales y montañas; que dejen de contaminar los ríos y los mares; que dejen de intoxicar los pueblos y los alimentos. Reitero un peligro que destaqué en mi carta encíclica LAUDATO SI: si la actual tendencia continúa, este siglo podría ser testigo de cambios climáticos inéditos y de una destrucción sin precedentes de los ecosistemas, con graves consecuencias para todos nosotros.
3.- Cántico de las criaturas de S. Francisco de Asís.
Altísimo, omnipotente, buen Señor,
tuyas son las alabanzas, la gloria y el honor y toda bendición.
Loado seas, mi Señor, con todas tus criaturas,
especialmente el señor hermano sol.
Por la hermana luna y las estrellas,
por el hermano viento,
y por el aire y el nublado y el sereno y todo tiempo.
Por la hermana agua,
la cual es muy útil y humilde, preciosa y casta.
Por el hermano fuego,
por el cual alumbras la noche,
Loado seas, mi Señor, por nuestra hermana la madre tierra,
la cual nos sustenta y gobierna.
Por aquellos que perdonan por tu amor,
y soportan enfermedad y tribulación.
Loen y bendigan a mi Señor,
denle gracias y sírvanle con gran humildad.
- Evangelio: Mateo 5: 13,16 Ustedes son la sal de la tierra. Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal deja de ser sal, ¿cómo podrá ser salada de nuevo? Ya no sirve para nada, por lo que se tira afuera y es pisoteada por la gente.
Ustedes son la luz del mundo: ¿cómo se puede esconder una ciudad asentada sobre un monte? Nadie enciende una lámpara para taparla con un cajón: la ponen más bien sobre un candelero, y alumbra a todos los que están en la casa.
Hagan, pues, que brille su luz ante los hombres; que vean estas buenas obras, y por ellos den gloria al Padre de ustedes que está en los Cielos.
- Introducción al diálogo.
En este tiempo en el que el perverso neoliberalismo -cimentado en el individualismo- incrementa la macro riqueza de los poderosos a costa de la explotación de los seres humanos y de la Madre Tierra; desde este lado de la Historia ¿qué podemos hacer por la liberación de los pueblos y de la madre naturaleza? ¿Cómo ser felices decreciendo y experimentando en nuestra cotidianidad el mismo respeto y amor que los Pueblos originarios tienen por la Madre Tierra y por la Vida?
¿Cómo ser sal y luz aquí y ahora para la madre tierra y para los más empobrecidos?
El Hermanamiento entre la Fundación Pueblo Indio y la Comunidad de Santo Tomás de Aquino, es una oportunidad…
Diálogo
- Ofrendas:
- Foto de Sebastiao Salgado, con texto
Sebastião Salgado, Prototipo de la conciencia ambiental-
Rendimos homenaje a la labor de este inmenso fotógrafo brasileño universal que conoció y fotografió a Monseñor Proaño y parte de la labor de la Fundación del Pueblo Indio del Ecuador. Él falleció el mes pasado. Toda su vida estuvo comprometida con la dignidad de los hombres y de los pueblos originarios, incluyendo, no sólo por medio de su fotografía -conocida en el mundo entero sino con su amor testimonial, se dedicó al cuidado del Planeta. En Brasil transformó la granja de sus padres, en una reserva natural. En 20 años -con el Instituto Terra- logró sembrar 20.000 árboles, rehabilitar 360.00 manantiales, revitalizar al menos 90.000 km2 de la querida Amazonía. A él lo reconocemos como Sal de la tierra y Luz del mundo
- De l@s herman@s de Pucahuaico, vídeo
Les comparto el aporte del video realizado por el Grupo Makipurashun de la Comunidad de San Clemente del Pueblo Kichwa Karanki, quienes participan mensualmente en los talleres de formación permanente. Podemos ver como avanzan en el crecimiento personal, en la forma de expresar sus ideas, lo que significa para ellos el cuidado de la casa común… Ahí vamos caminando… Se puede ver que integran el grupo compañeros de diferentes edades, y avanzan también de la mano con la tecnología.
Proyecto PIE Al celebrar el XXV aniversario, Bodas de Plata, del hermanamiento y cooperación entre la FPIE y Santo Tomás, queremos ofrecer el trabajo de la FPIE durante estos 25 años, primero con los niños indígenas de preescolar que a primeros de este siglo, milenio, por indolencia de los gobiernos estaban sin escolarizar; y ahora con las mujeres de las comunidades Kichwa de Imbabura que participan en el proyecto de cooperación en el proyecto de cooperación en educación informal “Sembrando Amor como El Maiz”
- Bolsas
- Ofrendas abiertas de la comunidad
- Pan y Vino. Imagen y texto
Te ofrecemos este pan que necesitamos para la vida, con el deseo de repartirlo para que no falte a nadie.
Te ofrecemos este vino expresión de alegría y vitalidad compartida que queremos llegue a todos sin exclusiones
- Anáfora
- Señor Dios Nuestro aquí nos tienes de nuevo reunidos celebrando, en tu presencia y bajo tu cuidado amoroso, el 25 aniversario del encuentro entre la FPIE y la comunidad de STA
- Mantener vivo el espíritu de participación mutua, colaboración y amistad profunda es sin duda, un signo del Espíritu que actúa e infunde en todos nosotros la Gracia de Dios
- No podemos olvidar todos los conflictos que asolan la tierra y que siempre inciden en el desgaste, en la injusticia con los más débiles.
- Equipo. Pero frente a ello, te bendecimos Señor porque infundes en nosotros la fuerza de la Utopía, la fuerza movilizadora que nos permite mirar hacia adelante en busca de una nueva humanidad, a pesar de las amenazas que nos acosan y a veces parecen vencernos.
- Reconocemos en el Sumak Kawsay, el emblema de un evangelio de vida para todos los pueblos, una esperanza y un reto para la humanidad entera.
- Te damos gracias Padre porque eres el Dios de vida y, frente al consumo sin límites que propugna la sociedad del consumo, alumbras la cultura que apuesta por sobriedad y la armonía con el Cosmos
- Equipo Gracias Señor siempre por este encuentro entre la comunidad de STA y la FPIE, allí en su espacio de las montañas majestuosas de los Andes, o en nuestra casa pequeña de Madrid
- Te pedimos Señor Dios nuestro que envíes tu espíritu sobre la FPIE y sobre todos nosotros, a fin de que ese espíritu de Jesús esté presente en todo momento para animarnos y fortalecernos en los compromisos solidarios.
- Porque ese mismo Jesús al que ahora invocamos, dio todo, hasta su propia vida, por la liberación de la humanidad, y EL mismo en la noche que iba a ser entregado, tomó el PAN en sus manos, lo bendijo, la partió y repartió entre todos diciendo:
- Equipo Tomad y comed todos de él porque este es mi cuerpo que se entrega por vosotros
- Al acabar la cena hizo lo mismo con la copa, te dio gracias y la repartió entre todos diciendo
- Equipo Tomad y bebed todos de ella porque es el cáliz de mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna que se derrama por toda la humanidad para su total liberación.
- Este es el sacramento de nuestra fe
- Equipo Anunciamos tu muerte y proclamamos tu resurrección. ¡Ven Señor Jesús!
- Por ÉL, con ÉL y en ÉL, te alabamos y te damos gracias, Señor Dios Padre nuestro, te queremos pedir por todos nuestros amigos de allá y de acá que nos han precedido, que son ejemplo de vida y parte esencial de este hermanamiento. Y en la unidad del Espíritu Santo nos unimos en la oración del Padre Nuestro
Padre Nuestro de la Justicia (cantoral, pág. 92) cantan José María y Nidia
- Comunión (Música Sinfonía del Nuevo Mundo)
Acción de gracias: Finalizamos esta celebración, dándote gracias, Dios Padre y Madre, por el hermanamiento entre nuestra comunidad y la Fundación Pueblo Indio del Ecuador que desde hace décadas nos ha permitido acercarnos a la realidad de los pueblos indígenas, conocer sus luchas, su respeto por la Naturaleza y su relación especial, casi sagrada, con la Madre Tierra, la Pachamama.
Reconocemos los valores de esa espiritualidad como parte de nuestra cosmovisión cristiana y como retos a seguir defendiendo en un mundo amenazado por la superexplotación del planeta y por las amenazas para la propia vida humana.
Recordamos que luchar contra la crisis ambiental que afecta a la tierra y la humanidad ha sido uno de los legados del Papa Francisco, en continuidad con la tradición del propio Francisco de Asís que encontraba en cada elemento de la Naturaleza la propia imagen de su Creador.
Te damos gracias, Dios Padre y Madre, por habernos abierto la mente a ese sueño ecológico y al cuidado del medio ambiente del que nos hablaba Francisco y que seguimos reconociendo en la cultura de los pueblos indígenas de América Latina.
Finalmente te damos gracias también por el ánimo que seguimos recibiendo en celebraciones como esta para ser sal y luz en nuestros entornos de modo que la pobreza, la brutal desigualdad y la destrucción del planeta vayan siendo vencidas día a día a manos de la paz, la justicia y el equilibrio de la Naturaleza, según el mito cristiano de una humanidad nueva en un universo nuevo.
Invitación a la comunidad
- Canto final Cuidar la Tierra (Juan Morales)
- Avisos.