REAVIVAR LA ESPERANZA

MÚSICA AMBIENTACIÓN ( «Falls» de la película «La Misión»)

INTRODUCCIÓN

Jesús fue un hombre tierno y humano, amigo de niños y enfermos, observador de la belleza del campo, de las aves, de la higuera y del tiempo, pero también fue un indignado ante los abusos y atropellos que golpeaban a los humildes.

El evangelio recoge dos gritos de protesta, uno contra los señores absolutos de las naciones que oprimen con su poder y el otro contra la religión convencional de Jerusalén y sus administradores, que atan cargas pesadas y las echan sobre las espaldas de la gente. Así fue Jesús y así tendríamos que ser nosotros “voz de los que no tienen voz y voz contra los que tienen demasiada voz” como dice Jon Sobrino.

Jesús irrumpe en ese mundo cerrado y anuncia el reino de Dios. Hay esperanza y perspectivas de mejora, les dice a los que le siguen y por esto, los envía a que pregonen la buena nueva a los cuatro vientos.

En una sociedad gobernada por los intereses políticos y económicos que dejan sin alternativa a los más pobres, surgen anunciadores de buenas noticias que pregonan y trabajan por un mundo diferente. Es posible, nos dicen, dar una dirección nueva a las energías de la humanidad, para lograr una vida más humana.

Esta es la esperanza activa que hay que cuidar, alimentar y difundir.

Se repite la música del principio

 

PETICIÓN DE PERDÓN

Pasamos por las calles  indiferentes al dolor de los hermanos. Nos asusta mirar. Perdón por la ceguera

Señor, perdón

  • Caminamos en silencio  ante el ruido de la injusticia .Perdón por la mediocridad….

Señor, perdón

  • Repartimos nuestro tiempo a cuenta gotas  para no perder el control de nuestro tiempo. Perdón por el egoísmo…

Señor, perdón

  • Cerramos el corazón y la voz ante el sufrimiento del hermano: Perdón por nuestro individualismo….

Señor, perdón

1ª LECTURA

Del libro “Creo en la Esperanza” de José Mª Diez Alegría

“Todas las fuerzas de intereses bastardos, de conformismo, de cobardía, de pesimismo histórico, que tratan de ahogar cuanto es contestación en nombre de la liberación y de la justicia, serán impotentes para eliminar de la historia la resistencia contra el egoísmo, la injusticia y la opresión. Esta lucha, con todas sus complejidades históricas, con sus incertidumbres, sus riesgos y sus temporales retrocesos, es un dinamismo en marcha hacia el fin, hacia la venida de Jesús, que será la consumación y el triunfo definitivo. Esta es la esperanza cristiana y yo creo en esta esperanza”.

CANCIÓN: Tiempo de despertar Nº 28, Pago. 24

2ª LECTURA Hechos 1, 8  Marcos 16,15

La buena noticia de la resurrección no es un modo de eludir las tareas de aquí abajo, sino más bien una llamada a ponernos en camino. Así leemos en los Hechos de los Apóstoles cuando estaban reunidos y le preguntaron:

«Señor, ¿es ahora cuando vas a restablecer el reino de Israel? » Él les contestó: « A vosotros no os toca conocer el tiempo y el momento, sino que recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra»… y estando ellos mirando al cielo mientras se iba, se les aparecieron dos hombres vestidos de blanco que les dijeron: «Galileos, ¿qué hacéis ahí mirando al cielo? …Id por el mundo entero, proclamad la Buena Nueva a todas las gentes… Vosotros seréis mis testigos… hasta los confines de la tierra»

INTRODUCCIÓN AL DIÁLOGO

La utopía es hija de la esperanza. Y la esperanza es el ADN de la raza humana. Como nos dice Pedro Casaldáliga, pueden quitárnoslo todo menos la fiel esperanza. Ahora bien, ha de ser una esperanza creíble, activa, justificable y que actúa.

Esperar, es primeramente descubrir en nuestros días una vida que no puede parar. Acogiendo esta vida, somos conducidos a poner, aquí y ahora, en medio de los azares de nuestra sociedad, signos de un porvenir distinto, semillas de un nuevo mundo que, a su momento traerán su fruto.

Para los primeros cristianos, el signo más claro de este nuevo mundo era la existencia de comunidades compuestas de gente de distintos orígenes y lenguas. Estas pequeñas comunidades surgían por todo el mundo mediterráneo. Sobrepasaban todo tipo de divisiones que les impedían estar cerca unos de otros, estos hombres y mujeres vivían como hermanos y hermanas. En Madrid somos varias las comunidades que tratamos de vivir esta utopía y conocemos a muchas personas y grupos que sin ser cristianos, viven la misma ilusión de cambiar las cosas. Y nos damos cuenta que debemos dar pasos hacia el futuro, sabiendo que lo decisivo para nuestras Comunidades no son los entendidos, sino los testigos.

Preguntas

ü    ¿Tenemos conciencia de que el cambio no va a ser posible si antes no denunciamos, las proclamas de los pregoneros que dicen que hay que dejar las cosas como están, porque no hay nada que hacer, porque somos mayores o porque estamos cansados de intentarlo?

ü    ¿Somos animadores de nuevas esperanzas sugiriendo caminos concretos, gestos, campañas o colaborando con grupos humanitarios, defensores del medio ambiente, de los  derechos de la mujer, como “Mujeres para la esperanza”, de campañas contra el hambre etc. etc.?

OFRENDAS

Presentamos como ofrenda estos dos documentos:

ü    El primero es la Encíclica del Papa Francisco y con el queremos simbolizar la esperanza de que se produzca una importante  mejora en las actuaciones y mensajes de nuestra Iglesia institucional.

ü    El segundo es el documento que recoge los ESTATUTOS DE ORGANIZACIÓN DE LA COMUNIDAD CRISTIANA DE LA PARROQUIA DE SANTO TOMAS DE AQUINO aprobados en marzo de 1977. Con él queremos poner en esta mesa las actuaciones directas y las colaboraciones con proyectos vividos en el transcurso de estos casi cuarenta años de historia,  cuyo objetivo  ha sido y sigue siendo que se haga realidad la esperanza de una sociedad justa y solidaria.

ü    Proyectos comunitarios y compromisos de grupo. Se repite la música mientras se pasan las bolsas.

ü    Mareas

ü    Pan y vino

PLEGARIA  EUCARÍSTICA

1.- ¡EL Señor está con nosotros!

TODOS: ¡Y con todos los que no han podido estar hoy aquí!

2.- ¡Alcemos nuestras miras y levantemos el corazón¡

TODOS: Lo tenemos levantado hacia el Señor.

3.- Necesitamos Padre, el Espíritu del Señor Jesús para fomentar el progreso de nuestra madurez en la fe; para poder reavivar la esperanza; aumentar nuestra solidaridad, nuestra fraternidad simbolizados en esta eucaristía como lugar de encuentro y de pan compartido.

TODOS: Danos Padre, el Espíritu del Señor Jesús para que sepamos ser fieles a su mensaje.

4.- Te bendecimos y damos gracias Padre por los  brotes de Esperanza activa que constatamos a pesar de las inquietudes, incertidumbres, angustias y desmadres.

TODOS: Danos Padre, el Espíritu del Señor Jesús para que sepamos ser fieles a su mensaje.

5.- Te damos gracias por la Primavera Árabe en su proceso local,  no necesariamente al estilo occidental, allí donde prospera.

TODOS: Gracias Padre, porque tu Palabra es eficaz a pesar de que nuestros oídos se cierran a veces a tu mensaje.

6.-Te damos gracias por la Primavera Eclesial, que rebrota en las comunidades adultas, franqueando barreras, o desvirtuando los muros y fronteras ridículas que pretenden aislar, reprimir, excluir  a las mujeres y a los que no tienen voz.

TODOS: Gracias Padre, porque tu Palabra es eficaz a pesar de que nuestros ojos no ven a veces lo que se evidencia a nuestro alrededor.

7.- Ese mismo Espíritu nos anima hoy a recordar y revivir los gestos y palabras que nos transmiten la entrega de Jesús.

TODOS: Cuando reunido con sus discípulos tomó pan, lo bendijo, lo partió y lo repartió diciendo:

TODOS: Tomad y comed todos de él, porque este es mi cuerpo que será entregado por vosotros.

8.- Del mismo modo, acabada la cena, tomó el cáliz y dándote gracias de nuevo lo pasó a sus discípulos diciendo:

TODOS: Tomad y bebed todos de él porque este es el cáliz  de mi sangre, sangre de la Alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por todos  los hombres para el perdón de los pecados.

Haced esto en conmemoración mía.

9.- Este es el sacramento de nuestra fe.

TODOS: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. Ven Señor Jesús.

10.- Acuérdate Señor, de los que formamos tu Iglesia visible, de nuestra comunidad, de todas las comunidades cristianas, de todos los que trabajan por tu Reino y de todas las personas y grupos comprometidos con hacer de nuestra casa común, un lugar más humanos donde poder  vivir con dignidad.

TODOS: Ayúdanos a todos y a todas a ser consecuentes con nuestra fe reavivando la esperanza de que es posible cambiar las cosas.

11.-Recordamos también  a nuestros hermanos sembradores de  esperanzas y que gozan ya de tu plenitud de vida.

(Silencio conmemorativo)

TODOS: Por Cristo, con él y en él a ti Dios Padre misericordioso en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén.

12.-Unidos en una misma fe con el Espíritu del Señor Jesús digamos confiadamente  la oración que nos enseñó:

TODOS: Padre Nuestro…

13.- Démonos fraternalmente un signo de paz

COMUNIÓN. Música de La Misión: «El oboe de Gabriel»

ACCIÓN DE GRACIAS

Señor, en esta celebración en la que nos hemos reunido en tu nombre, queremos darte gracias porque con el ejemplo de tu vida nos has hecho renacer la esperanza en todos los hombres y mujeres, especialmente de los últimos y excluidos, de que es posible otra sociedad en la cual se acabe con la pobreza, la marginación, la violencia, el enriquecimiento de unos pocos a costa de la mayoría y el respeto a todas las personas, sin distinción.

CANCIÓN: Habrá un día en que todos… Nº 83 Pago 70