En la Asamblea del 5 de octubre de 2024, la Comunidad aprobó esta Colaboración Solidaria para el periodo 2025-2027 con una asignación para el año 2025 de 6.500€

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Cooperación de formación integral no formal

  1. Antecedentes

Conscientes de que la educación – formación es vital y responde a un proceso permanente que no se limita a un momento en particular, desde hace al menos 26 años optamos por aportar en un proceso de educación permanente con las compañeras indígenas de comunidades kichwa de Imbabura, compañeras que por otra parte no han podido acceder a la educación formal, y la mayoría de ellas sin haber podido hacer ni siquiera estudios elementales de primaria, y por lo tanto desconocer el alfabeto.

El proceso es permanente, además, porque frente a la realidad cambiante en un mundo tan asimétrico y despiadadamente desigual, tiene relevancia la educación liberadora, porque -como sostiene Paulo Freire- permite a las personas desarrollar su capacidad crítica y transformadora, en lugar de simplemente transmitir conocimientos de manera pasiva.

Tras las huellas de Monseñor Proaño, y gracias al aporte solidario de la Comunidad Santo Tomás de Madrid, desde el año 2011 llevamos adelante el programa “Sembrando amor como el maíz”, entre la Fundación Pueblo Indio del Ecuador y el Centro de Formación de Misioneras Indígenas de Ecuador, dos entidades hermanas, constituidas por voluntad testamentaria de Mons. Proaño hace ya 36 años.

Para los “descartados” de la sociedad como insiste el Papa Francisco, y más aún para l@s indígenas, la situación en nuestro país, empeora cada vez más en todo sentido, las políticas neoliberales arremeten con más fuerza en el actual gobierno, no existen fuentes de trabajo, los precios de los bienes se disparan y búsqueda de encontrar la subsistencia para los hogares cada día es más complicada. Por otra parte, los hijos crecen y las compañeras tienen que tener elementos para acompañarlos en sus procesos educativos y de vida en un mundo adverso. En el horizonte no se vislumbra soluciones ni a corto, ni a mediano y menos aún a largo plazo. En esta realidad las mujeres kichwa son las que reciben con más intensidad los golpes de las medidas neoliberales, y si a esto se suma el avance de la tecnología que es inevitable y con él se añaden los problemas y conflictos intergeneracionales, la dependencia-adicción de los adolescente y jóvenes, y la consiguiente pérdida cultural, nos vemos abocados a problemas complejos de enfrentar.

En este contexto, contar con un espacio de encuentro y formación permanente de forma mensual como lo es el programa “Sembrando amor como el maíz” ayuda a las mujeres y a los jóvenes a entender y resistir los embates de la modernidad, y a enfrentar con criterios y pensamiento crítico comunitario la complejidad.

  1. Objetivos

✓        Mantener talleres mensuales para favorecer de forma colectiva, el análisis de la  realidad con mujeres y jóvenes indígenas de las comunidades empobrecidas de Imbabura.

✓        Fortalecer el proceso de formación y organización necesarias para la liberación de las mujeres kichwa de Imbabura.

✓        Hacer conciencia de que los valores milenarios de los pueblos originarios, su identidad y espiritualidad, son los que tenemos que mantener.

✓        Favorecer la reflexión de la Palabra de Dios, que se halla viva en los valores culturales y cosmovivencia de las naciones originarias.