Un trabajo decente para una vida digna 4 de mayo de 2025
- Canción: Somos un pueblo que camina pág. 8
- Introducción. Hemos elegido hoy como tema de celebración el trabajo. Es un tema que suscita diferentes miradas y puntos de vista.
El 1 de mayo es una fiesta universal, que se celebra de diversas formas. Con manifestaciones de los sindicatos, con fiestas populares o con celebraciones religiosas. Todas hacen referencia al valor del trabajo que construye y dignifica al ser humano, que ha sido y sigue siendo, en gran parte, una conquista de la organización y la lucha de los trabajadores. Aunque en estos momentos las organizaciones sociales estén en crisis, siguen siendo uno de los motores del avance de los derechos humanos.
En el mundo actual, la igualdad de derechos de las personas, reconocido en las constituciones de muchos países, no están garantizados por leyes que limiten el ejercicio de un poder económico de una minoría. De esta manera sigue creciendo la desigualdad de forma inevitable.
El papa Francisco ha denunciado en sus comunicaciones a este sistema económico como un sistema que mata. Y ha apoyado en numerosas intervenciones a los movimientos sociales que se organizan y proponen alternativas a este sistema. En una de sus alocuciones a empresarios y sindicalistas, que vamos a escuchar, ha defendido el promover espacios de trabajo digno y útil para la sociedad. Dice que la mejor inversión es en la gente, creando oportunidades para que las personas puedan construir una sociedad de bienestar para todos. Y afirma que el bien común debe estar por encima del lucro y del capital.
El evangelio encierra una sabiduría que trasciende nuestro concepto de justicia, nos hace pensar en una igualdad por encima de los méritos e insiste una vez más en una opción preferente por los últimos.
3 1ª Lectura. El trabajo, según Francisco (Extractado de dos Encuentros con los Movimientos Populares en 2014 y 2016)
*Tierra, techo y trabajo: Francisco en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares (Oct. 2014); *Encuentro con el mundo del trabajo en México” (Feb. 2016)
“…Todos estamos invitados a realizar un sueño que vuela hacia lo más alto, de tal manera que a través del trabajo libre, creativo, participativo y solidario el ser humano exprese y acreciente la dignidad de la propia vida.
No existe peor pobreza material que la que no permite ganarse el pan y priva de la dignidad del trabajo. El desempleo juvenil, la informalidad y la falta de derechos laborales no son inevitables, son resultado de una previa opción social, de un sistema económico que pone los beneficios por encima del hombre.
Hoy, al fenómeno de la explotación y de la opresión se le suma una nueva dimensión de la injusticia social: los que no se pueden integrar, los excluidos, los «sobrantes». Hablamos de la cultura del descarte, que sucede cuando en el centro de un sistema económico está el dios dinero y no la persona humana. Hoy estamos asistiendo al descarte de los jóvenes…. Se sacrifica una generación de jóvenes para poder mantener un sistema en cuyo centro está el dios dinero y no la persona humana.
Bajo el paradigma de la utilidad económica como principio de las relaciones personales, la mentalidad reinante propugna la mayor cantidad de ganancias posibles, a cualquier tipo de costo y de manera inmediata. La mentalidad reinante pone el flujo de las personas al servicio del flujo de capitales, provocando en muchos casos la explotación de los empleados como si fueran objetos para usar y tirar, y al fin, descartar. Dios pedirá cuenta a los esclavistas de nuestros días. El flujo del capital no puede determinar el flujo y la vida de las personas.
Todo trabajador, esté o no esté en el sistema formal del trabajo asalariado, tiene derecho a una remuneración digna, a la seguridad social y a una cobertura jubilatoria. Pero subsisten entre ustedes muchos cooperativistas y trabajadores de oficios populares que están excluidos de los derechos laborales, que se les niega la posibilidad de sindicalizarse, que no tienen un ingreso adecuado y estable. Hoy quiero unir mi voz a la suya y acompañarlos en su lucha.
Todos tenemos que luchar para que el trabajo sea una instancia de humanización y de futuro; que sea un espacio para construir sociedad y ciudadanía. Esta actitud genera mejoras inmediatas, y a la larga se transforma en una cultura capaz de promover espacios dignos para todos.
Sé que no es fácil poder congeniar en un mundo cada más competitivo, pero es peor dejar que el mundo competitivo termine determinando el destino de los pueblos. El lucro y el capital no son un bien por encima del hombre, están al servicio del bien común. Y, cuando el bien común es forzado para estar al servicio del lucro, y el capital la única ganancia posible, eso tiene un nombre, se llama exclusión, y así se va consolidando la cultura del descarte
4 2ª Lectura, Texto de Martín Seco
“La igualdad como derecho adquirió mayoría de edad en la ilustración, época que representa el tránsito de una sociedad, la del antiguo régimen, estructurada a la sombra de privilegios, a una sociedad enmarcada en el principio de igualdad ante la ley.
No obstante, la concentración de los medios de producción en pocas manos arrojaba a la indefensión más absoluta a la mayoría de los ciudadanos. Los ideales de la revolución francesa -libertad, igualdad y fraternidad- fueron traicionados por el movimiento liberal a medida que fue evolucionando. Las inmensas desigualdades económicas transformaron en conceptos vacíos para la mayoría los derechos civiles y políticos.
No es extraño, por tanto, que desde distintos ámbitos se reclamase trascender el Estado liberal burgués con una nueva concepción, el Estado social, que parte de la consideración de que los aspectos económicos condicionan el ejercicio de los derechos civiles y políticos. Si el Estado quiere ser verdaderamente un Estado de Derecho y democrático, no tiene más remedio que ser también social, renegar del laissez faire e intervenir en el ámbito económico. Primero, para garantizar los derechos sociales y económicos, sin los cuales los derechos políticos y civiles serían para la gran mayoría de los ciudadanos letra muerta. Segundo, para establecer un contrapeso al poder económico, de manera que éste no pueda manipular a su antojo el juego democrático.”
Juan Francisco Martín Seco, economista.
Correlación entre la igualdad política y económica
Artículo de la Revista Éxodo, Nº 131
5 3ª Lectura Evangelio Mateo, 20, 1-8
6 .Introducción al diálogo. Celebramos hoy algo muy importante: el trabajo, que ocupa gran parte de nuestra vida y que es necesario para construir y mantener nuestros hogares, nuestra convivencia y también la actividad económica-mercantil, dimensión ésta en la que se centra la fiesta del 1 de mayo y a la que se refieren los textos que hemos leído.
Las tres lecturas, del papa Francisco, del economista Martín Seco y del evangelista Mateo tienen un hilo conductor: la cooperación en las relaciones laborales desde la clave de la igualdad. En Mateo, el mensaje es que no debe haber primeros y últimos sino que todos debemos ser iguales en la vida de la vida; para Martín Seco, la ilustración pregonó la igualdad de todas las personas frente a la sociedad del antiguo régimen que se estructuraba sobre privilegios; y el papa Francisco defiende que la economía debe estar al servicio del bien común de todos y no del lucro de algunos y el descarte de la mayoría.
Jesús salía al paso de los privilegiados de su época -judíos frente a gentiles, sacerdotes frene a laicos, ricos frente a pobres, etc.- para recordarles que todos estamos llamados a vivir con igual dignidad en el reino de Dios. Martín Seco plantea la necesidad de promover el Estado social, que intervenga en la economía para defender la dignidad y los derechos laborales frente al Estado liberal del “laissez faire”. Y Francisco reclama un trabajo decente, con remuneración digna, seguridad social, cobertura de jubilación y asociación sindical.
Críticas y propuestas en este primero de mayo, sobre las que podemos reflexionar:
- ¿Dónde nos situamos nosotros?,
- ¿Por qué apostamos?
7 Ofrendas:
- Trabajo voluntario de los jubilados de la comunidad
- Trabajo de cuidados
- Pan y vino
- Bolsas
8 Anáfora
L 1.- Señor Dios Nuestro, aquí nos tienes hoy reunidos para agradecerte primero la vida de todos tus hijos
L 2.- Hoy celebramos la dignidad y necesidad del trabajo para todos sin distinción.
Todos.- En un momento como este tenemos que agradecerte, SEÑOR, la vida del Papa Francisco que ha pasado entre nosotros sembrando y compartiendo amor y justicia para todos.
L 3.- ES una constante en su vida su predilección por los mas débiles , los descartados y así lo manifiesta continuamente con palabras y hechos.
Todos Hoy es el día en que tenemos que pedir y contribuir en que el trabajo no falte a nadie en la tierra
L 4.-Que ese trabajo dignifique a cuantos lo realicen.
L 1.- Que nadie abuse del trabajo de los demás.
Todos.- Que el trabajo sea motivo de humanidad y creatividad de los que lo diseñan y de los que lo realizan.
L 2.- Y así, a través de esta dignidad te cantamos el himno de alabanza: Santo, Santo, Santo (pag 78, nº 91)
L 3.- Solo afianzando nuestra confianza en TI y sabiendo que compartes con nosotros este momento como lo hiciste con tus discípulos aquella noche santa, tomando el pan y el vino, decimos contigo
Todos.- Tomad y comed todos este pan que es mi cuerpo y será entregado por vosotros,
L 4.- De la misma forma, tomaste el cáliz que contenía el vino, y dando gracias lo entregaste a tus discípulos diciendo:
Todos.- Tomad y bebed todos de el, porque es el cáliz de mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna que será entregada por vosotros y por todos, para el perdón de los pecados. Haced esto en memoria mi.
L 1.- Este es el sacramento de nuestra fe.
Todos.- Anunciamos tu muerte y proclamamos tu resurrección, ¡Ven Señor, Jesús!
L 2.- Recordando a todas las personas que forman y formaron parte de nuestra vida, nos unimos las manos para dirigirnos en oración para rezar el Padre Nuestro
9 Comunión (música instrumental)
10 Acción de Gracias
Señor Jesús, te damos gracias porque nos invitas a ser sembradores de vida y cocreadores contigo en cada tarea que hacemos.
Te damos gracias por el don de compartir nuestros talentos, para construir juntos un mundo más justo, más fraterno y más humano. Porque el trabajo no es sólo una fuente de sustento, es una vocación y una participación en la obra creadora de Dios, en la que todo acto justo, que hacemos, es ya semilla de tu Reino.
Tu conoces las luchas de aquellos, que buscan un trabajo que les permita vivir con dignidad, que nunca olvidemos que todo hombre y toda mujer tienen derecho a un trabajo digno, que no suponga un peso, sino un camino de realización, de servicio y comunión contigo; que sea un gesto de amor, como tú eres también signo del amor del Padre-Madre-Dios.
11 Avisos
12 Canción: Hay que levantar pág. 86
13 La Paz