Transcribimos la respuesta de Monseñor Agrelo, obispo emérito de Tánger.
Queridos amigos: me pedís que me pronuncie sobre algo de lo que no tengo ni idea. Y tampoco tengo motivos para hacérmela, pues, en principio, he de suponer que todos toman sus decisiones con sentido de justicia. Cuando digo todos, entiendo los responsables de las diócesis y los responsables de las instituciones del Estado implicadas en el proceso de inmatriculación de cualquier propiedad.
Si eso no fuese así, supongo que hay instrumentos legales para denunciar abusos o injusticias de las que se tenga constancia. Pero como veis, todo va en forma condicional, pues se trata de materia en la que no tengo un solo elemento de juicio para decir nada. Os deseo todo lo que pueda contribuir al bien de la Iglesia.
Un abrazo de este hermano menor.
Santiago Agrelo