REENCONTRARNOS, ¿PARA QUÉ? 25 de septiembre de 2016

A la comunidad se le envío el siguiente correo previo a la celebración

El próximo domingo, 25 de septiembre, nos encontramos, o mejor, nos re-encontramos tras el paréntesis vacacional del verano. Os proponemos como “lema” de la celebración

“El re-encuentro de la comunidad, ¿para qué?”

Tal como en la propia eucaristía iremos reflexionando, compartiendo y celebrando, el lema pretende lanzarnos otra vez al trabajo de la Comunidad en la construcción del Reino, en el trabajo por un mundo mejor.

Desde una referencia al reciente Congreso de Teología que, como siempre, nos centra en estos comienzos de curso, os propondremos lecturas del capítulo 12 de la carta a los Romanos y del capítulo 1 del Evangelio de Marcos.

En su librito Los Sacramentos de la Vida Leonardo Boff nos propone que un sacramento es un signo que simboliza un encuentro de la comunidad con Jesús. Por ello, en algún momento de la celebración, quisiéramos sacramentalizar este encuentro como la confirmación en la tarea que en este nuevo curso nos espera.

A la entrada mesa con bizcochos y cartel “nuestra bienvenida”

Música Un millón de amigos (R. Carlos)

Acogida Nuevos-Apagar Móviles

Presentación de la Celebración                                                     

Ante la ingente tarea que se nos presenta en todos los órdenes, hay personas que paralizan  y se escudan en auto justificaciones  como la siguiente: “Yo ya soy mayor, esto es para los jóvenes”.

Por su parte, la sociedad de la apariencia y del pronto éxito nos va jubilando en muchos aspectos por “ser mayores” —cuando en las sociedades de ayer “ser mayor o ser anciano” era un honor, un título que acreditaba el buen sentido y la sabiduría—. Pero es justo reconocer que no es lo mismo ser mayor que ser inútil. Y, como dice el Eclesiastés, “hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo”; también un tiempo para ser útil en madurez de la vida.

A este propósito, observando el panorama de los y las asistentes al  reciente congreso de teología,  Elsa Tamez, teóloga de reconocido prestigio internacional, dijo: “vuestro rostro y vuestras canas no engañan a nadie; pero sois  un grupo envidiable que no se encuentra fácilmente en cualquier parte; hoy por hoy seguís siendo necesarios”.

En la celebración de esta mañana, que vamos a centrar en el reencuentro, se nos va a hacer, entre otras, esta pregunta: “Encontrarnos, ¿en qué y para qué?  Atención, pues.

CANCION Vamos Juntos Pg. 85, estribillo y estrofa nº 4

1º Lectura En la carta a los romanos que vamos a escuchar, San Pablo, además de marcarnos unas pautas de comportamiento,  nos dice algo que ya hemos anticipado en la introducción: independientemente de nuestra edad, de nuestros conocimientos o de nuestras distintas situaciones,

¡Todas las personas tenemos algo que aportar!

¡Todas  podemos participar!

¡Todas somos necesarias!

Vamos a poner nuestros dones en común y vamos a seguir construyendo

Epístola a los romanos 12,3 al final

2ª Lectura Nuestro reencuentro de hoy  actualiza, en pequeña escala, el encuentro de Jesús con las tareas del Reino. Este episodio lo relata Marcos en tres claves que anticipan nuestra actitud ante los desafíos comunitarios y ciudadanos de hoy:

En primer lugar,  Jesús sube desde Nazaret hasta el Jordán para unirse al movimiento de protesta y de cambio de vida que está impulsando  Juan Bautista;  es el momento de entrega de Jesús  hasta dar la vida por las causas del Reino. En segundo lugar, al salir del agua, cae en la cuenta de que el Espíritu de Dios está con él hasta hacerlo plenamente  “Hijo del Hombre” (con Mayúscula); es el momento de la confirmación mesiánica y universal de Jesús. Y finalmente, el Espíritu lo empuja  al desierto, es decir, al centro de la sociedad,  donde encontrará todas las corruptelas (diablos)  y apoyos (ángeles) para llevar a cabo el anuncio del Reino de Dios.

Se trata de tres momentos que  hoy actualizamos en nuestro reencuentro, pues, ante  los  nuevos problemas y retos,  vamos a contar con muchas personas animadas por el mismo Espíritu que animó la vida de Jesús.

Lectura de Mc 1. 9-12

Participación Asamblea –

Iniciamos un nuevo curso y creemos que con las experiencias vividas y a la luz de estas lecturas debemos hacerlo con energías renovadas.

Está claro que la tarea está fuera, pero ¿en qué espacios  y compromisos creemos que debemos esforzarnos más?

¿Qué debemos reforzar dentro de la comunidad para que nos sirva de referencia y empuje en estos compromisos?

Acto de la Confirmación comunitaria

Lector Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos regeneraste, por el agua y el Espíritu Santo: escucha nuestra oración; llénanos de espíritu de sabiduría y de inteligencia, de espíritu de consejo y de fortaleza, de espíritu de ciencia y de piedad; y danos la fuerza para retomar la tarea de la construcción de tu Reino en este curso que ahora iniciamos. Por Jesucristo nuestro Señor

Lector Extendemos nuestras manos, unos a otros, como renovación de las promesas bautismales, recibiendo la fuerza del Espíritu Santo, para que nos ayude en nuestra vida cristiana y para que seamos testimonios de Jesús de Nazaret

Mano derecha sobre el de nuestra derecha

Nos ponemos las manos unos a otros diciendo:

Recibe al Espíritu Santo que nos fortalece en la tarea”

Nos damos ahora el abrazo de paz que nos conforta y anima en este curso que empieza

Ofertorio

Congreso

Proceso de paz en Colombia

Próxima Asamblea

Bolsas con música del concierto para trompeta y orq. en Re Mayor, de Telemann y esperar en silencio hasta que terminen de pasar

Pan y Vino

ANAFORA

Lector Volvemos a estar juntos, con la alegría que nos produce el reencuentro.  Regresamos como lo hicieron los discípulos de Jesús que, después de su marcha a diferentes lugares de Betania, volvieron con sus vivencias y experiencias, buenas y malas, para compartirlas entre ellos.

TODOS: Te damos gracias, Señor por el descanso de estas semanas, por haber disfrutado de la naturaleza, por haber descubierto nuevos lugares de nuestro maravilloso planeta, por el encuentro con la familia, con los amigos y con cuantas personas se han cruzado en nuestro camino. En todas hemos reconocido tu rostro.

Lector En el Congreso de Teología hemos constatado el sufrimiento y la desesperación de muchos hombres, mujeres y niños que, huyendo de la guerra o buscando una vida mejor, están siendo rechazados y humillados en nuestras fronteras y encerrados como ganado en campamentos a cambio de dinero pagado por  países que incumplen sus propias leyes de acogida.

TODOS: Señor, que la solidaridad ciudadana y las organizaciones en defensa de los derechos de nuestros hermanos migrantes, presionen a nuestros gobiernos para que encuentren una salida digna a este grave  problema.

Lector Gracias por nuestra comunidad, que nos reúne y nos interpela en tu nombre y gracias por  cada uno de sus miembros. Gracias por cuantos, sin necesitar tenerte por compañero, trabajan por la justicia. Que en nuestros encuentros nos impregnemos de tu vida para que la compartamos con quienes nos rodean. Que nuestras diferencias sean fuente de riqueza y no de distanciamiento. Danos tu luz  en la próxima asamblea para emprender el curso con fuerza e ilusión.

TODOS: Y como nos decía San Pablo en la epístola que acabamos de escuchar: debemos ofrecer los dones que cada cual ha recibido a nuestra comunidad y, sobre todo,  a la sociedad, alentados con la fuerza del Espíritu Santo, renovada hoy en la confirmación.

Lector Tenemos motivos suficientes para creer que estás entre nosotros, como lo estuviste aquella noche de jueves santo rodeado de tus discípulos, cuando tomaste el pan, lo partiste y lo repartiste diciendo:

TODOS: TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL, PORQUE ÉSTO ES MI CUERPO, QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.

Lector Del mismo modo, acabada la cena, tomaste la copa y dando gracias, la entregaste a tus discípulos diciendo:

TODOS: TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL, PORQUE ÉSTE ES EL CALIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS Y POR TODOS LOS HOMBRES PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HACED ÉSTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Lector Este es el sacramento de nuestra fe

TODOS: ANUNCIAMOS TU MUERTE Y PROCLAMAMOS TU RESURRECCIÓN. ¡VEN, SEÑOR JESÚS!

Lector Recordamos a los hermanos y hermanas que nos han precedido, cuyo ejemplo ha ido modelando nuestras vidas y cuya memoria mantenemos presente. En especial a quienes nos han dejado en los últimos meses. Señor, guárdalos en tu regazo.

Desde la mesa se van recordando a los hermanos que nos han dejado y se da pie a los comuneros que quieran recordar a otras personas

(BREVE SILENCIO).

TODOS: POR CRISTO, CON ÉL Y EN ÉL, EN LA UNIDAD DEL ESPÍRITU SANTO, TODO HONOR Y TODA GLORIA, POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS. AMÉN

Y sintiéndonos unidos a todos los hombres y mujeres repartidos por todo el mundo, juntamos nuestras manos y repetimos la oración que tú nos enseñaste:

PADRENUESTRO

COMUNION Concierto para violín y orq. BWV 1042-Adagio, Bach   

ACCION DE GRACIAS

Te damos gracias Dios del Universo, por darnos la oportunidad de comenzar un nuevo curso en Comunidad. En esta celebración hemos renovado nuestro compromiso de trabajar por un mundo más justo y humano y para ello contamos con la ayuda de tu Espíritu que nos alienta, impulsa y motiva a la acción personal y comunitaria.

CANCION Id y Enseñad Pág. 22  – 1ª Estrofa y Estribillo        AVISOS