MISERICORDIA Y CARIDAD, compromiso social y Evangelio 3 febrero 2013
Acogida El domingo pasado vimos “¿Qué queréis?” Este Jesús nos dice cómo comportarnos para acompañarle.
Perdón. Padre nuestro, al acercarnos al altar de la ofrenda, preferimos decirte, como Jesús nos enseñó: “Dios mío, ten compasión de mí, que soy pecador”. O, por lo menos, decirte de corazón: Ten compasión de mi debilidad, que no llego a donde quiero en mi camino hacia ti. Y darte gracias, también, pero no como diría el fariseo “por no ser como los demás”.
1ª Lectura De la obra de Ion Sobrino e Ignacio Ellacuría «Espiritualidad y seguimiento de Jesús» , págs 454.455
Dicho de forma positiva, la honradez con la realidad es la misericordia ante esa realidad. Misericordia no se reduce aquí a lo emocional-afectivo (aunque lo puede acompañar), sino que significa re-acción ante el sufrimiento ajeno… Es esa reacción primera y última, desde la cual cobrarán sentido otras dimensiones del ser humano, pero sin la cual ninguna otra cosa llega a ser humana. En esa misericordia se realiza el ser humano cabal, como dice Lucas en la parábola del buen samaritano; con ella los evangelios tipifican al mismo Jesús -tantas “movido a misericordia»- al mismo Dios, a quien se le enternecen las entrañas y por ello acoge y abraza al hijo pródigo. La misericordia es, pues, el modo correcto de responder a la realidad y es también el modo último y decisivo, como lo sanciona la parábola del juicio final.
Todo, absolutamente todo, pende del ejercicio de la misericordia… Recalcamos la primariedad y la ultimidad de la misericordia como acto primordial de espíritu…Que sea algo primero y último significa que la misericordia no se ejercita por ninguna otra razón más que por el sufrimiento ajeno entrañado en nosotros. Así aparece en el evangelio. El buen samaritano no actúa por cumplir un mandamiento, sino movido a misericordia… Hay un dato innegable en los evangelios: la misericordia de Jesús. Tiene misericordia del leproso que se le acerca, le toca saltándose las convenciones sociales y religiosas, y le cura. Tiene misericordia del ciego de Jericó, de la mujer adúltera…etc Ante la misericordia, cualquier otra cosa ( riesgos personales, oscuridades, derechos de la institución ) debe ser subordinada a ella, sin que otros intereses, aunque sean legítimos, puedan ser invocados para ignorarla o hacerla pasar a segundo plano.
2ª Lectura Corintios 12, 31 y 13.13 (leída entre dos):
1 Ambicionad los carismas mejores. Y aún os voy a mostrar un camino excepcional.
2 Ya podría yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles;
1 si no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o unos platillos que aturden.
2 Ya podría tener el don de profecía y conocer todos los secretos y todo el saber, podría tener fe como para mover montañas;
1 si no tengo amor, no soy nada.
2 Podría repartir en limosnas todo lo que tengo y aun dejarme quemar vivo;
1 si no tengo amor, de nada me sirve.
2 El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe;
1 no es mal educado ni egoísta; no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad.
2 Disculpa sin límites, cree sin límites,
1 espera sin límites, aguanta sin límites.
2 El amor no pasa nunca. ¿El don de profecía?, se acabará.
1¿El don de lenguas?,
2enmudecerá.
1 ¿El saber?,
2 se acabará. Porque limitado es nuestro saber y limitada es nuestra profecía; pero, cuando venga lo perfecto, lo limitado se acabará.
1 Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre acabé con las cosas de niño.
2 Ahora vemos confusamente en un espejo; entonces veremos cara a cara. Mi conocer es por ahora limitado; entonces podré conocer como Dios me conoce.
1 En una palabra: quedan la fe, la esperanza, el amor: estas tres. La más grande es el amor.
Palabra de Dios
Evangelio Jn 8, (1-11)
Y Jesús se fue al monte de los Olivos.
Y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba.
Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio.
Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?
Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo.
7 Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.
E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.
Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?
Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.
Canto Tiempo de despertar nº 28 pg. 24
Reflexión Sobrino: La misericordia es descubrir al prójimo como persona, ver sus necesidades y solidarizarse con él de forma efectiva.
Diferencia entre misericordia y caridad
Limosna, ¿misericordia o caridad?
En STA, qué practicamos?
Ofrendas Padre nuestro, bien sabemos que no es suficiente. Pero nos atrevemos a ofrecerte ese dolor, esa extrañeza, a veces vergüenza, que nos invade a la vista de un pobre en plena calle. A veces no sabemos si es mejor darle algo, o seguir cargando con ese sufrimiento de ver a un hermano en la extrema necesidad. Nos duele esa injusticia básica, como es que alguien a nuestro lado tenga que arrastrarse para poder comer.
Cintas de algodón a modo de pulsera con el lema «Movidos por la misericordia» a la manera del mensaje anterior que era «Movidos por la esperanza».
Pan y vino: Con este pan y este vino que hemos puesto en nuestra mesa queremos simbolizar el esfuerzo que individual y colectivamente realizamos los miembros de esta Comunidad para conseguir que desaparezcan situaciones de sufrimiento o penuria que sufren muchas personas conocidas y desconocidas, actuaciones que tanto pueden incluirse en el marco del ejercicio de la “caridad o la misericordia” como en el de lucha por la “justicia”.
Bolsa: Y lo mismo podemos decir respecto de nuestras aportaciones económicas destinadas al apoyo de los proyectos en los que estamos colaborando.
Si alguien quiere añadir alguna ofrenda puede hacerlo ahora.
Anáfora
Celebramos en esta eucaristía el encuentro con la misericordia, quizás uno de los rasgos más notables de nuestro seguimiento de Jesús. Una vida compasiva será la que nos acerque más a nuestros hermanos y, por ellos, a Jesús.
1. Jesús recorría todas las ciudades y los pueblos. Enseñaba en las sinagogas, proclamaba la buena noticia del Reino y sanaba todas las enfermedades y dolencias. Viendo el gentío se compadeció porque estaban cansados y decaídos, como ovejas sin pastor, nos cuenta Mateo
2. La compasión, las entrañas de misericordia, no tienen un destinatario concreto separado de los demás, incluido en el club de los nuestros; se dirigen a todo aquel que sufre la enfermedad, la marginación, la soledad, el dolor,…, se dirigen al leproso, a la viuda, al ciego, al asaltado por los bandidos.
TODOS. Señor, ayúdame a salir de mis prisas para compartir mi tiempo con quienes lo necesitan. La misericordia nos exige una nueva mirada, un mirar con otros ojos, un mirar activo, no la simple contemplación pasiva que nos impide implicarnos.
3. La misericordia puede incluso superar a la ley, o llevarnos a posiciones que incumplen leyes y ahí la misericordia puede estar más fundamentada, pues el que alguien no tenga papeles le hace más necesitado de la acogida, precisamente a-pesar-de-la-ley.
TODOS. Necesitamos la fuerza de la misericordia que procede de Jesús, pues Él dijo: “No he venido a abolir la ley, sino a cumplirla”, pero también que “no ha sido el hombre creado para el sábado, sino el sábado para el hombre”.
4. Te alabamos, Señor, porque nos has dado a Jesús, quien nos muestra el camino de la misericordia. Por ello te cantamos… SANTO, SANTO, SANTO…
5. La compasión, el compadecerse, representa el compartir los padecimientos y, para compartirlos, debemos también estar con nuestros semejantes, comer su pan y beber su vino.
6. Compartir el pan y el vino es lo que hizo Jesús, cuando tomó el pan, lo partió y lo dio a sus amigos, diciendo:
TODOS: Tomad y comed todos de él, porque esto es mi cuerpo.
7. Asimismo, tomó la copa de vino, diciendo:
TODOS: Tomad y bebed todos de él porque este es el cáliz de mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por toda la humanidad. Haced esto en conmemoración mía.
8. Éste es el sacramento de nuestra fe.
TODOS: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección, ven, Señor Jesús.
TODOS: Todos podemos estar en la situación del leproso, del enfermo, del apartado; necesitamos de alguien que se compadezca de nosotros y todos debemos estar cumpliendo el papel de Jesús, compadeciéndonos de quienes sufren.
9. Te pedimos Padre, la capacidad de escuchar el clamor de las víctimas, la honradez en el encuentro con la realidad y la solidaridad justa y amorosa que urja en la búsqueda del compromiso personal y comunitario. Unamos nuestros corazones y nuestras voces con las palabras que tu hijo nos enseñó:
TODOS: Padre nuestro…
10. Danos, Jesús, manos de ternura, comprensión con los que fallan, paz para reconciliar, amor para acoger, salud para cuidar.
TODOS Líbranos, Jesús, de la suficiencia para poder comprender a los distintos.
11. La paz estará con nosotros si sabemos transmitirla, si en nuestro abrazo está nuestro espíritu, si, como ahora, nos damos un abrazo de paz.
Comunión/Música Meditación de Thais
Acción de Gracias Queremos darte gracias a ti, Jesús de Nazaret, por tu vida y tu palabra que constituyen los cimientos del edificio en cuya difícil construcción colabora nuestra Comunidad.
Junto a ti añadimos en nuestra gratitud a todas esas personas que, como Pedro Casaldáliga, con su vida o su testimonio escrito contribuyen a la profundización y actualización de tu mensaje.
Cada uno de nosotros quiere también dar gracias a esta Comunidad en su conjunto y a esas otras instituciones que, como Iglesia de Base y Redes Cristianas, nos estimulan y nos ayudan a no sentirnos sólo y aislados en nuestro esfuerzo por conseguir una sociedad más justa y solidaria.
Canto Cuando el pobre nada tiene nº 62 pg. 52