María la Madre de Jesús                                                 11 de Mayo de 2.003

Cántico 51, la estrofa

– Lectura: Lucas 1 (46-48)

– Cántico 51 2ª estrofa

– Lectura: Lucas 1 (49—53)

– Cántico 51, 3a estrofa.

Lectura:(1 Corintios 1 (26 —31)

Ofertorio, Introducción Ofrendas.

-Flores      – GRATUIDAD

– Foto madre Irak – SACRIFICIO

– Madre feliz   – FELICIDAD … (Foto de abuela felíz)

– Poesía      – DEJAR DESARROLLAR (educar para la vida)

– Pan        – AMASAR para compartir

– Vino      – CANA

7   Canción 66, pag 35.

PLEGARIA EUCARISTICA

El.- Nos hallamos reunidos en comunidad para celebrar la presencia de Jesús Resucitado

Todos.- Te damos gracias Señor, porque cada domingo nos convocas para celebrar juntos esta eucaristía.

E 2.- Te damos gracias por encarnarte en el seno de una mujer y enseñamos que a partir de ella y con ella empezaste a sentir la pobreza y limitación que la condición humana y social nos impone.

E 3.- Gracias te damos Padre porque en Puebla los obispos de un Continente americano, hambriento de pan y justicia, despertaron a una Iglesia más encarnada y comprometida y en ella a María, mujer y madre de Jesús, no como «Virgo Potens» sino como mujer y modelo de madre entre todas las madres.

E 4.- Nos presentaron a María como una invitación a mirar nuestros orígenes, hacía una Igle­sia de los pobres como la que vivió ella, con una vivencia más comunitaria y menos clerical, con una fe más encamada y menos espiritualista, con una piedad menos sofisticada y más popular, nacida de un cristianismo menos tremendista y más humano. En una palabra con un mayor acercamiento entre Dios y los hombres, entre el cielo y la tierra.

Todos.- Gracias Padre por escoger a María como madre y encamarte en ella como uno de no­sotros.

E 5.- Destronar a María, quitarle la corona y el cetro de Reina y Señora, es ponerla a nuestro lado como mujer, madre y modelo; es devolverle su verdadero papel que tuvo en la primitiva iglesia y el papel que debe tener en nuestra comunidad.

Todos.- Gracias Señor por recordamos a María como «un gran signo del rostro maternal y misericordioso del Padre» o como «presencia sacramental de los rasgos maternales de Dios» entre nosotros.

El.- María personifica la opción preferencial de Dios por los pobres, el triunfo de Dios en lo débil, la parcialidad de Dios hacia el que sufre, sobre todo hacia el que sufre la injusticia del poderoso

E 2.- Sé, María nuestro modelo y enséñanos la manera de no aceptar pasivamente las cir­cunstancias adversas de la vida personal y social.

E 3.- Solamente así podremos devolver a la devoción mariana su carácter profetice y libera­dor.

E 4.- Por todo ello unimos nuestras voces a la comunidad de creyentes del mundo entero, principalmente a la de los pueblos iberoamericanos que hoy también te cantarán:

Todos.-SANTO, SANTO …(Nicaragüense,)

E 5.- Dios nuestro, padre de los creyentes, sostén de los más débiles y esperanza de los más pobres.

TODOS – Te damos gracias Señor porque, semana tras semana, partimos el pan y nos con­gregas alrededor de esta mesa, preparada con el entusiasmo y el esfuerzo de todos.

El.- Como aquella noche en la que iba a ser entregado y estando reunidos con los suyos, tomó el pan y dando gracias al Padre, lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo:

TODOS.- TOMAD Y COMED…

E 2- Del mismo modo, acabada la cena tomó la copa, te dio gracias y la dio a sus discípulos diciendo:

TODOS.- TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL…

E 3.- Señor, al recordar tu entrega hasta la muerte y tu resurrección, queremos recordamos a nosotros mismos que somos un pueblo en marcha y de ninguna manera una comunidad ins­talada.

E 4.- María, como tantas madres, vio a su Hijo perseguido, torturado y ajusticiado pública­mente y, a pesar de todo, se mantuvo fiel a la causa y plenamente compenetrada con su mi­sión.

Todos.- Enséñanos, María, a cooperar activamente en la obra de tu Hijo y a denunciar los atropellos de los hijos de tantas madres que sienten en carne propia la incertidumbre y las atrocidades de la guerra y la barbarie.

E 5. – Quisiéramos cambiar muchas cosas de este mundo e implantar otro modo de pensar de vivir y compartir, más de acuerdo con tus principios. Nos lo acabas de mostrar en la asam­blea de la comunidad y nos lo irás descubriendo a la largo del año.

El.- Durante unos breves momentos te escuchamos Señor: (SILENCIO)

E 2.- Oímos tu voz Señor y estamos dispuestos a no dejar de lado nuestros compromisos contraídos con nuestra comunidad

TODOS . Somos tu pueblo Señor y queremos decirte que no estamos cansados ni decepcio­nados, que nos quedan todavía muchas agallas para luchar y abrir caminos. Aliéntanos y da­nos fuerza para seguir avanzando juntos.

E 3.- Queremos brindar contigo María y con los que esperamos la llegada de su Reino.

Canción 77.

Poema de Casaldáliga

Bendición y fin de la celebración