Celebración de la Colaboración Solidaria: La Mochila llena de oportunidades

El cuidado de las familias migrantes.      30 de octubre de 2.022

1 Bienvenida e introducción: Apagar teléfonos, revisar zoom, saludo a los  nuevos presenciales o virtuales. Saludémonos y démonos la paz

Los obligatorios aislamientos en los tiempos de pandemia, produjeron sobre todo en las personas que vivían solas una mayor sensación de soledad. A medida que la situación ha mejorado, la sociedad más responsable se ha dado cuenta de la importancia de mejorar la relación con los demás, sobre todo con los más débiles. En la Comunidad hemos dedicado algunas celebraciones al tema del cuidado.

La celebración de La Mochila llena de oportunidades nos acerca al cuidado de los más débiles: los niños que además son de familias inmigrantes. Esta Colaboración Solidaria, que la Comunidad apoya, está dentro del Programa de Acogida y Apoyo a la Integración de la Fundación Juanjo Torrejón  dirigiendo sus acciones a promover y mejorar las capacidades y habilidades sociales, culturales y formativas de las familias migrantes, favoreciendo su inclusión en la sociedad.

El programa como todos los de la Fundación es sin ánimo de lucro ya que los cuidados no pueden ser un negocio, porque no se puede hacer beneficio con la vida de nadie”.

2 1ª Lectura a partir de Papeles 225. Infancia, un futuro hipotecado.

Desde el inicio de la crisis económica en 2008 muchos menores se han visto afectados por un cúmulo de circunstancias que les ha conducido a una situación de enorme vulnerabilidad  y desigualdad en su acceso a derechos y oportunidades. La desigualdad en derechos básicos como la vivienda, la salud y la educación repercutirá en el desarrollo de niños y niñas y no podrán salir de la pobreza convirtiéndola en un fenómeno hereditario.

En las escuelas, los recortes de los maestros, las aulas llenas, el desconocimiento de la lengua, el desfase del nivel académico, deficiencias de tipo intelectual, la falta de equipos de asesoramiento pedagógico y    psicológico provoca la falta de seguimiento y evaluación de los alumnos, y  reducen el tiempo que deben dedicar a las familias implicadas en la vida del menor.  Entre los padres y madres hay un número  elevado de personas desocupadas y otros que trabajan en la economía sumergida.

Pero el impacto no se reduce solo al ámbito escolar. Afecta y a veces con más gravedad al ámbito doméstico. El impago de las hipotecas que pueden acabar en la pérdida de la vivienda familiar, el calvario de alquilar habitaciones en viviendas compartidas o incluso la ocupación de pisos vacíos, abocan a la inestabilidad y a una tremenda tensión en las familias. Otro punto preocupante es la alimentación. La malnutrición motivada por la falta de ingresos es un hecho palpable y tiene un enorme impacto en el desarrollo físico e intelectual en los primeros años de vida.

¿Afrontar el problema o hipotecar su futuro? Es necesario  un compromiso firme de la sociedad que debe ir más allá del ámbito puramente asistencial. Los planes contra la pobreza infantil que se han presentado   hasta ahora por diferentes administraciones son totalmente insuficientes y demuestran muy poca voluntad política. Mientras no se ponga remedio, los menores seguirán siendo víctimas de la situación y lo serán por tres vías. En primer lugar, recibiendo los efectos  de la situación en su propia persona y experiencia (malnutrición, falta de perspectivas y horizonte). En segundo lugar a través de una escuela que debido a los recortes tiene una educación de peor calidad, repercutirá en su acceso al mercado laboral y perpetuará su situación de pobreza. Y en tercer lugar, sufrirán los desequilibrios familiares que la crisis está provocando en  sus progenitores y afectará a su desarrollo emocional. Estos tres frentes los convierten en tres veces víctimas.

Tenemos que denunciarlo con fuerza. La coyuntura desfavorable en la que viven estos niños  no es solo económica.  Se trata de una situación social  de urgencia que afecta al presente, pero que hipotecará el futuro de varias generaciones.

Música. Gabriel Fauré. Cantique de Jean Racine

3 Poema. Diversidad (soneto en versos tridecasilabos)

Todas las personas inevitablemente aunque somos iguales somos diferentes. Dignidad y derechos lo son permanentes, cualidades y límites van juntamente.

En dignidad de personas, todas iguales, pero todas diversas en capacidades.

La mente y el cuerpo tienen sus cualidades pero todos somos del todo original.

Si fuéramos perfectas, fuera insoportable.

Si no fuéramos diversas, qué aburrimiento. La diversidad nos hace la vida amable.

El cuidado mutuo y el acompañamiento nos hacen una humanidad corresponsable de hacer la diversidad enriquecimiento.

4 2ª Lectura Evangelio Jn 10, 11-16

Yo soy el Buen Pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas. No así el asalariado, que no es el pastor ni las ovejas son suyas. Cuando ve venir al lobo, huye abandonando las ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa.

A él sólo le interesa su salario y no le importan nada las ovejas. Yo soy el Buen Pastor y conozco los míos como los míos me conocen a mí, lo mismo que el Padre me conoce a mí y yo conozco al Padre. Y yo doy mi vida por las ovejas.

Tengo otras ovejas que no son de este corral. A esas también las llevaré; escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño con un solo pastor.

5 Reflexión  comunitaria.

Los cuidados, al servicio de la vida, tranquilizan, equilibran, dan seguridad. Quién sabe cuidar sabe también, por eso mismo, respetar, prestar atención, mirar con interés, escuchar, proteger, dedicar tiempo, consolar, conmoverse, tocar con cariño, dar paz.

Cuidar es un estado del espíritu, es un modo de decir “te quiero”, es un modo de “ser yo para que tú seas”. La solidaridad expresa concretamente el amor por el otro, no como un sentimiento vago, sino como «determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común; es decir, por el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente responsables de todos».

FRANCISCO nos habla de la cultura del cuidado como camino de paz, necesaria para erradicar la cultura de la indiferencia, del rechazo y de la confrontación, que suele prevalecer hoy en día.

Cada persona es un fin en sí misma, nunca un simple instrumento que se aprecia sólo por su utilidad. Convivimos en la familia, en la comunidad, en la sociedad, donde todos los miembros tienen la misma dignidad.

Necesitamos construir una lógica del cuidado mutuo. Cada quien puede llegar ahí desde lugares muy distintos, incluyendo la fe para quien la sienta. Desde ahí, necesitamos reconstruirlo todo: los modos en que sostenemos la vida y nuestra propia idea de cuál es la vida que merece ser vivida…

Motivar la reflexión

  • Ofrendas Mochila
  • Libro de texto
  • Lápices
  • Bocata
  • Bolsas
  • Quien quiera ofrecer algo
  • Pan y vino

7 Anáfora                           

Lector. Cuidar es un principio ético. El cuidado nos hace totalmente humanos y miembros conscientes de la Naturaleza, porque nos pone al servicio de la vida.

Lector Los diferentes tipos de cuidado son los que mantienen la vida en cualquiera de sus formas: cuando somos niños, cuando somos débiles, cuando estamos solos, cuando enfermamos, cuando somos mayores, cuando no nos valemos por nosotros mismos;

Lector. Hoy en la celebración de La Mochila llena de oportunidades traemos a la mesa de tu amistad, el cuidado de los niños, de los niños olvidados, de los niños masacrados por las guerras, de los niños víctimas de las hambrunas y, en nuestro mundo, de los niños víctimas de la violencia física y sexual de la pederastia.

Lector. Envíanos tu Espíritu renovador para cantar un canto de alabanza y gratitud:

Todos SANTO, SANTO, SANTO…

Lector Con el ejemplo de tu vida en el cuidado nos ofreciste el camino para seguir construyendo el Reino. Por esto te crucificaron.

Lector Depositamos nuestra esperanza sobre tu sacrificio y el de tantas vidas silenciadas por el Reino y nos atrevemos a repetir en su memoria tus gestos de la cena de tu despedida. Allí tomaste el pan, lo partiste y repartiste diciendo:

Todos.- Tomad y comed todos de él, porque este es mi cuerpo que se entregará por todos.

Lector Del mismo modo, tomando la copa la mostraste a los presentes diciendo:

Todos.- Tomad y bebed todos de esta copa, porque esta es mi sangre, sangre de la nueva alianza, que será derramada para el cuidado y salvación de todo el género humano.

Lector Y nos dijiste: “Cuando os reunáis, haced esto en mi memoria”.

Todos.- Nuestra comunidad seguirá repitiéndolo porque, mientras sigamos, nos prometiste estar siempre a nuestro lado hasta hacer de este mundo un reflejo de tu Reino.

Lector Tenemos que construir y construirnos, salvarnos juntos y latir libres y amorosos, según tu voluntad. Por ello con las manos unidas proclamamos la oración del Padre que cuida a sus hijos

Padre Nuestro…

Lector Comunión.

Lector – Compartimos el pan y el vino como hizo Jesús en su última cena.

Música Strauss 4 últimas canciones

8 Acción de Gracias. Gracias por haber comprendido que, como hizo el samaritano, no basta con acercarnos al otro para  curar su herida, también  debemos quedarnos cerca  y hacernos cargo de sus cuidados posteriores, con hospitalidad

Gracias por ayudarnos a caminar creando vínculos con los demás a través del diálogo  y la acogida

Gracias porque la diversidad, la tolerancia, el respeto y el cuidado mutuo sean valores vivos  en esta comunidad

Te damos gracias por la misericordia y la fidelidad. Por tu pan de cada día, el de hoy y el de mañana

Quien quiera dar Acción de Gracias

 9 Avisos Breve Informe de la Fundación. Otros avisos

10 Despedida