Eucaristía 24 de enero de 2021

  • Introducción. Buenos días a todas y a todos; nuestra celebración de hoy tiene como tema fundamental la necesidad de la protección de la Naturaleza y de la Madre Tierra.

Como ya sabéis la mayoría de los expertos coinciden en que la causa de esta pandemia de la Covid19 que está causando tanto dolor y tantas muertes es consecuencia de una zoonosis; la zoonosis es cualquier enfermedad infecciosa que se transmite de forma natural de los animales (en su mayoría vertebrados) al ser humano, y viceversa. Varias enfermedades como el ébola, la salmonelosis o la influenza son zoonosis.

Ahora, expertos alertan de que la invasión humana a los hábitats y ecosistemas animales, junto a la crisis climática, ha provocado que cada vez haya más enfermedades que las especies transmiten a los humanos tales como la COVID-19.

Por todo ello, nos parece oportuno que hoy reflexionemos sobre la necesidad de proteger a la naturaleza y a la madre tierra pues nos va en ello la vida, nunca mejor dicho, y la necesidad de comprometernos por un mundo más ecológico, más justo y más fraterno.

  • Oración Cita 215 de la Laudato Si. En este contexto no debe descuidarse la relación que hay entre una adecuada educación estética y la preservación de un ambiente sano. Prestar atención a la belleza y amarla nos ayuda a salir del pragmatismo utilitarista. Cuando alguien no aprende a detenerse para percibir y valorar lo bello, no es extraño que todo se convierta para él en objeto de uso y abuso inescrupuloso. Al mismo tiempo si se quieren conseguir cambios profundos, hay que tener presente que los paradigmas de pensamiento realmente influyen en los comportamientos. La educación será ineficaz y sus esfuerzos serán estériles si no procura difundir también un nuevo paradigma, acerca del ser humano, la vida, la sociedad y la relación con la naturaleza. De otro modo seguirá avanzando el paradigma consumista que se transmite por los medios de comunicación y a través de los eficaces engranajes del mercado.
  • Petición de Perdón. Te pedimos perdón Señor por las agresiones que hacemos a la naturaleza,

Cuando no tenemos en cuenta el origen de los alimentos que consumimos, si son producidos con el uso de insecticidas, plaguicidas y otros productos que envenenan el medio ambiente como los ríos, la tierra, el aire, etc.

Cuando la energía que consumimos proceden de empresas que no producen energías renovables.

Cuando tenemos nuestro dinero en bancos que poseen muchas acciones de empresas que dañan el medioambiente como los fondos de inversión que especulan en los mercados de futuro de productos alimenticios (arroz, maíz, trigo, etc.)

Perdón Señor, Perdón                 

Música: 4 estaciones de Vivaldi, la primavera, un par de  minutos)

  • 1ª Lectura    (Leonardo Boff) La ecología no trata únicamente de las cuestiones relacionadas con lo verde o las especies en extinción. La ecología supone un paradigma  nuevo, es decir, una forma de organizar el conjunto de relaciones de los seres humanos entre sí, con la naturaleza y con su sentido en este universo. Ella inaugura una nueva alianza con la creación, alianza de veneración y de fraternidad. No hemos sido creados para situarnos por encima de la naturaleza como quien domina, sino para estar a su lado como quien convive como her­mano y hermana. Descubrimos así nuestras raíces cósmicas y nuestra ciudadanía terrestre. Hoy no son sólo los pobres los que deben ser liberados de la cau­tividad de un modelo de desarrollo que les niega la dignidad, dilapida sus recursos y quiebra el equilibrio elaborado a lo largo de millones de años de trabajo cósmico. El clamor de los pobres se une así al grito de la Tierra. Y a partir de ahí se ensancha la Teología de la Liberación verdaderamente integral y universal, porque concierne a todos y al planeta entero. La experiencia ecológica permite una nueva recupera­ción de lo sagrado en la creación, una nueva imagen de Dios, una concepción más amplia y cósmica del misterio cristiano y una nueva espiritualidad.
  • Evangelio Lucas, 12  16-21  Poner el foco vital en la acumulación de riquezas no hace sino anestesiar nuestro pensamiento, nuestra autocrítica, y lleva a actuar con respecto a la naturaleza y a los otros de forma dañina, provocando abusos e injusticias.

“Les propuso este ejemplo: Había un hombre rico, al que sus campos le habían producido mucho. Pensaba ¿Qué voy a hacer? No tengo dónde guardar mis cosechas. Y se dijo, haré lo siguiente: echaré abajo  mis graneros y construiré otros  más grandes, allí amontonaré todo  mi trigo, todas mis reservas. Entonces yo conmigo hablaré: Alma mía, tienes aquí muchas cosas guardadas para muchos años, descansa, come, bebe, pásalo bien, pero Dios le dijo: Pobre loco!! Esta misma noche te reclamarán tu alma ¿Quién se quedará con lo que has preparado? Esto vale para toda persona que amontona para sí misma en vez de acumular para Dios.”

Hagamos unos  minutos de silencio

  • Introducción al diálogo. Se trata ahora de reflexionar en comunidad, de pensar juntos para llegar a comprometernos.

Inmersos en la pandemia, hemos  visto la necesidad de cambiar cuando salgamos de ella, así lo hemos asumido como Comunidad, y ese es nuestro nuevo Proyecto. Lo que hemos hecho hasta ahora no nos sirve, tenemos que reconducir nuestro actuar. No podemos repetir lo anterior.

Para construir entre todos ese nuevo paradigma os proponemos poner en común las reflexiones que nos surgen en torno a los siguientes titulares.

  • Tomar conciencia
  • Binomio inseparable: Tierra/Humanidad
  • Cuidado de la naturaleza/ cuidado de las personas
  • Respeto a la biodiversidad
  • Nuestra vida cotidiana y el respeto a la naturaleza,
  • Nuestros errores
  • Nuestros compromisos de cambio

 

  • Ofrendas 1.-Ponemos sobre la mesa éste libro “Tu Consumo puede cambiar el Mundo”, de Brenda Chávez que estuvo en nuestra Comunidad dando una charla , y simboliza nuestros esfuerzos por modificar las decisiones del consumo. Tratar de no beneficiar a empresas que estén contribuyendo al abuso social, socioambiental, económico, laboral o político. Ayudar así a aliviar el cambio climático y la brecha social y promover una economía humanizada que persiga el Bien Común y Global.

2.-Esta foto simboliza las movilizaciones de los jóvenes en todo el Mundo: “Viernes por el Futuro” para exigir a sus gobiernos políticas contra el cambio Climático,  y por un Progreso Sostenible.

3.- Este tren, (enseño una maqueta de tren) simboliza los cambios que queremos hacer en nuestros estilos de vida, por ejemplo en el transporte: menos volar, más tren, más caminar, más transporte público, menos coche: No Contaminar.

4.- Ofrecemos también el el Pan, necesario en justicia, para que nadie pase hambre

Y el Vino, fruto de la vid que la Tierra nos ofrece, que nos da fuerzas, para seguir en el compromiso cristiano

  • Anáfora/Oración. Señor y Padre nuestro, abrimos nuestro corazón a la Madre Tierra para reconocer el bien y la belleza que sembraste en ella, reflejada en todos los pueblos, en la naturaleza toda.

Ayúdanos a descubrir que todos los pueblos son importantes, que todos son necesarios, que todos tienen un valor en sí mismos, que son rostros diferentes de la misma humanidad, de la misma creación que amas.

Y porque la Tierra es Madre, reconocemos que todos nosotros somos hermanos, tenemos la misma constitución, todos los seres humanos caminamos interconectados junto con el hermano sol, la hermana luna, el hermano río, la hermana montaña, la naturaleza toda.

Señor y Padre nuestro sabemos que la Tierra y la Humanidad no están separadas, forman una Unidad, la única casa común, y todo grito de los pobres y todo gemido de la naturaleza es gemido de la Tierra y gemido nuestro.

Señor y Padre nuestro, estamos en medio de una crisis que nos va a purificar, ayúdanos a recuperar lo sagrado en la creación, una civilización más fraterna, una nueva espiritualidad…una ética del cuidado mutuo para proteger la Tierra.

Para celebrar con anticipación un mundo de justicia, el Reino, hemos preparado esta mesa compartiendo el pan y el vino, símbolos de la hermandad que nos une.

Todos.– Tomad y comed todos de él, porque esto es mi cuerpo, que será entregado por vosotros.

Del mismo modo, acabada la cena, tomó el cáliz, y dándote gracias de nuevo, lo pasó a sus discípulos diciendo:

Todos.- Tomad y bebed todos de él, porque este es el cáliz de mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna que será derramada por todos los hombres y mujeres para su total liberación.

Este es el sacramento de nuestra fe.

Todos Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven, señor Jesús!

Y todos juntos, con la fuerza que nos da tu Presencia unimos nuestras manos y nos atrevemos a decir: Padre nuestro….

Equipo: Señor Jesucristo, que dijiste a los apóstoles: “La paz os dejo, mi paz os doy, pero no como la da el mundo… ayúdanos a despertar, a tomar conciencia de que la madre tierra está debilitada y no tiene la capacidad de reproducir más vida porque la agresión es demasiado grande.

Con la alegría y la fuerza de Jesús, participemos dichosos en su mesa, en la mesa de todos.

  • Comunión                                                                          Imagine, J. Lennon

1 minuto de silencio

  • Acción de Gracias. Te damos gracias por el ejemplo de los voluntarios, voluntarias y ONG’s que luchan incluso con su vida por el cuidado de la tierra.

Te damos gracias por atender y proteger a esa casa común que es la Tierra, para que sea cuidada,  compartida y disfrutada por todos y todas.

Desde la enseñanza de Leonardo Boff te damos gracias por el esfuerzo y compromiso de la Comunidad por la experiencia ecológica que nos permite una nueva recupera­ción de lo sagrado en la Creación, y una concepción más amplia y cósmica del misterio cristiano y una nueva espiritualidad.

  • Avisos