“Diálogos de paz en Colombia, una puerta abierta a la esperanza”     24 febrero 2013

Canción Rap de introducción (“La guerra”)

Presentación

Seguimos caminando al lado de las víctimas, tan cerca como podemos según nuestras posibilidades y fuerzas. No nos olvidamos de ellas porque ya forman parte de nuestro transcurrir, de nuestro caminar y hacer en la vida, en cada una de nuestras vidas. Colombia y su realidad se nos hace hoy, de nuevo, presente en nosotros y con nosotros.         Continúan las amenazas, continúan los hostigamientos y las violaciones de derechos humanos, continúa la inseguridad y el temor por la propia existencia y la de los seres queridos y nosotros, desde aquí, enterados y compartiendo sus procesos y sus sentimientos, nos unimos hoy especialmente a ellos.

Nuestra Comunidad, como integrante de la Comisión Ética, debe apoyar la labor legítima y esencial para alcanzar la democracia, la paz y la justicia en Colombia que llevan a cabo los campesinos desde la tierra así como la Comisión Intereclesial Justicia y Paz y que, en estos momentos, se encuentran gravemente amenazados.

La devolución de las tierras a sus antiguos propietarios es algo prometido, pero no realizado, continúan los desplazamiento y los usos ilegales de las tierras. Las víctimas del desplazamiento forzado están siendo revictimizadas, no hay condiciones para la verdad, justicia y reparación.

Son realidades duras, muy duras para los que las padecen. Nosotros debemos y queremos acompañarles y comprometernos con sus sufrimientos y sus luchas para poner fin a tanta injusticia.

Al mismo tiempo de la existencia de tanta barbarie, hoy se nos abre un atisbo de esperanza: “Las conversaciones de paz” que en este momento se están desarrollando en La Habana. Pero dicha esperanza, no ha de ser pasiva, ni tolerante con la injusticia, debe anclarse en la realidad sufriente para desde ella y con ella constituirnos en vehículos de protección de la dignidad humana.

Como Comunidad nos sentimos implicados en esa esperanza y llamados a contribuir a la Paz, la paz con justicia, la Paz con la Verdad, la Paz que atiende a la reparación, la Paz que camina hacia la utopía.

Explicación de los carteles (que se colocarán en el corcho)

  • ¿Informados?

Pensamos que la información que llega a España sobre este proceso por los medios de comunicación es escasa y sesgada. Hay motivos:Por un lado, los grupos empresariales Prisa y Planeta controlan una buena parte de los medios colombianos . Por otra, el gobierno español apoya de forma explicita prioritariamente los intereses de las grandes empresas españolas : Telefonica, Banco Santander, BBVA, Repsol, Endesa…,dedicando al gobierno colombiano todo tipo de elogios.

Los derechos humanos y la justicia social en Colombia  no parece, por tanto,  un tema relevante para ninguno de ellos.

  • Participación del Pueblo

Sin la participación del Pueblo no puede darse la tarea por conseguir la DEMOCRACIA REAL, LA LUCHA POR LA JUSTICIA. PONER LIMITE AL PODER CUANO NO ES JUSTO, CUANDO ABUSA DE SU PREPOTENCIA.

¿Por qué se junta la gente del pueblo? Para aprender a vivir con dignidad.¿Por qué se unen, luchan y se organizan? Para pedir lo que es justo. Para exigir el respeto de sus derechos.

Gracias a esa lucha se ha conseguido entre otras muchas cosas los DIALOGOS DE PAZ que tiene lugar en estos momentos en LA HABANA.

  • Sin Justicia no hay paz

Este es el grito unánime de todos los movimientos sociales de Colombia, en este momento crucial para la sociedad colombiana ante las negociaciones de paz después de tantos años de conflicto. ¿Qué consistencia puede tener una paz si se firmara sin hacer justicia a tantas masacres, a tantos millones de desplazamientos internos y externos, a tatos millones de Hectáreas de tierras robadas a los campesinos? Como recoge el MOVICE : VERDAD JUSTICIA Y REPARACIÓN, NO A LA IMPUNIDAD

  • Restitución de tierras

La vida de las Comunidades campesinas indígenas, mestizas y afro-descendientes, gira en torno a la tierra.

Así se expresa un miembro de estas comunidades:

“La tierra significa vida y paz, porque si yo tengo dónde trabajar, tengo vida y si yo tengo vida, tengo paz. La tierra para mi es una madre”.

Pero esta tierra les ha sido arrebatada a sangre y fuego para favorecer intereses de empresas multinacionales, y por eso, ahora ellos son comunidades desplazadas en resistencia.

Las negociaciones de paz tienen que pasar, necesariamente, por la restitución de sus tierras a las comunidades campesinas.

  • Esperanza contra toda desesperanza

El pueblo colombiano lleva luchando más de 50 años por conseguir la paz. Ahora confían en loa Diálogos de Paz de la Habana, aunque son conscientes de las grandes dificultades, si buscan una paz fundada en la justicia.

Esta esperanza que vive la mayoría del pueblo colombiano es para nosotros un reto y un estímulo que nos anima a trabajar activamente a favor de la justicia, la solidaridad y la paz, porque como decía H. Marcusse: “La esperanza solo se la merecen los que caminan”.

Queremos acompañarles en ese camino de esperanza, a pesar de los titubeos y el, desencanto de nuestra propia realidad. Hoy celebramos con las comunidades campesinas y con los activistas de los derechos humanos la alegría de la esperanza, basada en un fundamento común: el anuncio del Reino que Jesús nos presentó como una Utopía a la que caminamos cada día.

1ª Lectura Información del proceso de Paz (Extraído del Vídeo de J Giraldo)

El Proceso de Paz lo protagonizan el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).Han solicitado participar también otras organizaciones guerrilleras como el Frente de Liberacion Nacional (FLN) pero no las ha aceptado el gobierno.

Comenzaron en Oslo en octubre de 2012 y se ha continuado en La Habana donde siguen en la actualidad.

Este proceso de paz se inscribe en un larga y complicada historia de diálogos de paz en Colombia que lleva más de 50 años. El actual proceso  tiene un especial interés porque incluye una agenda pactada  de reformas sociales. Vamos a referirnos a algunos de los puntos de la agenda:

El punto básico es el problema de la tierra que se puede considerar el prioritario para el país porque:

Hay mas de 8 millones de has de tierras despojadas a sus dueños.

Hay más de 5 millones de campesinos expulsados de sus tierras y desplazados en el país. El despojo de las tierras es el origen de la guerrilla de las FARC en los años 60 como resistencia a la violencia.

Otro punto es la participación política. Se trata de abrir y garantizar el derecho de participación política a la oposición, en particular a los que sean desmovilizados de la guerrilla. No se puede volver a repetir el exterminio de la oposición como ocurrió con la Unión Patriótica, después de unos  diálogos de paz con el presidente Betancurt en los años 80.

El fin del conflicto armado encierra algunos problemas no resueltos todavía. Mientras se dan en La Habana estas conversaciones, en Colombia a diario hay batallas entre los dos actores armados.  Las FARC unilateralmente hicieron una tregua entre el 20 de noviembre y el 20 de enero. No así las fuerzas armadas del gobierno ni los grupos paramilitares.

El paramilitarismo sigue activo y en expansión con otros nombres. Sus actuaciones son conocidas y apoyadas por las FFAA y por las instituciones del gobierno. En estos días continúan los asesinatos y desapariciones de líderes sindicales, defensores de Derechos Humanos, líderes campesinos e indígenas, Los hostigamientos y amenazas son moneda común a los miembros de las comunidades que hemos acompañado como Comisión Ética.

Por lo que el paso a la paz exigiría una reforma a fondo de las estructuras y de las personas que están haciendo esta guerra. Si no, se puede repetir lo que ocurrió después de las negociaciones de paz en El Salvador, Guatemala, La antigua Yugoslavia…

El país vive de nuevo una  nueva esperanza:Las organizaciones sociales, los movimientos de victimas, los sindicatos, las organizaciones de derechos humanos, los indígenas, los afrodescendientes están convergiendo en plataformas que buscan la paz de forma clara. Colombianos y colombianos por la Paz. Marcha Patriótica, Ruta social común para la Paz en Colombia y otros más afirman en una carta al pueblo colombiano que el diálogo y la paz son la única salida.

También nosotros podemos participar en este proceso apoyando las iniciativas que se están   organizando en nuestro país. La Plataforma por la Paz y los Derechos Humanos quiere celebrar en Madrid los días 12 y 13 de abril un congreso, para proponer a las instituciones españolas una implicación solidaria en la búsqueda de la paz con justicia social en Colombia. Es un nuevo compromiso para nosotros como miembros de la Comisión Etica.

Canción ———————–“Sueño un nuevo amanecer”

Segunda lectura “Reconfigurar la esperanza, en un contexto de desesperanza”

Extracto de la conferencia de Javier Giraldo, con ese mismo título (Enero 2013)

Con frecuencia la esperanza ha sido vinculada a la previsión de un éxito o de una recompensa futura. La teología cristiana de la esperanza se ha construido durante muchos siglos rodeando de éxito y de recompensas los bordes finales de la existencia del individuo; llenando de atractivos el Cielo que vendrá después de la muerte. Pero, siendo tantos las razones para no esperar demasiado, cabe preguntarse si podríamos desligar la esperanza del factor del éxito o de la recompensa.

Todas las crisis de esperanza nos obligan a volver a mirar el Evangelio desde otras perspectivas. Los relatos de la pasión de Jesús presentan la muerte como un rotundo fracaso. Lo lamentaba ya el salmo 22: «Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado?«. Jesús prefirió morir registrando una dolorosa ausencia existencial de Dios, antes que morir traicionando alguno de los valores por los cuales se jugó la vida, y que lo llevaron al fracaso conmovedor de la cruz.

En esta teología se desvanece la imagen de la esperanza ligada inexorablemente al éxito y a la recompensa, y se apela a una comprensión de la esperanza relacionada más bien con el fracaso, lo que exigirá también la muerte de muchas imágenes de Dios atadas a la lógica existencial del éxito y de la recompensa.

Yo me atrevería a caracterizar esta lectura de la esperanza como una adhesión existencial a utopías y proyectos que no extraen su valor de la promesa de éxito o de recompensa, sino que valen por sí mismos y tienen un poder gratificante intrínseco, que puede convivir perfectamente con el fracaso sin por eso destruirse.

No ignoro que esta comprensión de la esperanza no cabe en nuestra cultura occidental. Una esperanza que pueda convivir con el fracaso, dirán no pocos, se convierte en una esperanza melancólica, despojada de alegría.

Pero un cristianismo auténtico tendría que ser contra-cultural, tendría que beber más decididamente en los patrones de las culturas subterráneas de los excluidos. Es lo que revela la densidad ritual y festiva de la cruz, donde se pone de manifiesto que es preferible sufrir la injusticia antes que participar en ella, aun cuando en la cultura dominante de hoy, lo primero tenga todas las connotaciones negativas del fracaso y lo segundo esté asociado a todos los éxitos y alegrías.

Para descubrir esto es necesario tomar conciencia de que la mayoría de las alegrías, éxitos y triunfos de nuestra cultura dominante están asociados a la injusticia, y de que la construcción de la justicia está ordinariamente asociada al fracaso y al sufrimiento. Con la fuerza que da esa convicción, seguiremos confesando sin triunfalismos, que “es posible esperar siempre, aunque los hechos inviten a la desesperanza”.

Tercera lectura. Ezequiel 37, 1-14 “Los huesos y el espíritu”

La mano del Señor se posó sobre mí  y el espíritu del Señor me llevó, dejándome  en un valle todo lleno de huesos. Me los hizo pasar revista: eran muchísimos los que había en la cuenca del valle; estaban calcinados. Entonces me dijo:

Hijo de Adán, ¿podrán revivir esos huesos?

Contesté:  Tú lo sabes, Señor.

Me ordenó:  Conjura así  a esos huesos: Huesos calcinados, escuchad la palabra del Señor: Yo os voy a infundir espíritu para que reviváis. Os injertaré tendones, os haré criar carne; tensaré sobre vosotros la piel y os infundiré espíritu. Así sabréis  que yo soy el Señor.

Pronuncié el conjuro que se me había mandado, y mientras hablaba, se oyó un estruendo;  la tierra se estremeció y los huesos se unieron entre sí. Pero no tenían aliento.

Entonces me dijo:  Conjura al aliento, conjura, hijo de Adán, diciéndole al aliento: Esto dice el Señor: Ven, aliento, desde los cuatro vientos y sopla en estos cadáveres para que revivan.

Pronuncié el conjuro que se me había mandado. Penetró en ellos el aliento, revivieron y se pusieron en pie: era una inmensa muchedumbre.

Esto dice el Señor: Os voy a sacar de vuestros sepulcros, pueblo mío. Infundiré mi espíritu en vosotros  para que reviváis, os estableceré en vuestra tierra  y sabréis  que yo, el Señor, lo digo y lo hago

Oráculo del Señor

Momento musical (silencio)

OFERTORIO

–        Ofrecemos las actividades realizadas en favor de las víctimas de Colombia como miembros de la Comisión Ética:

Participación en las Marchas y Caminatas de los campesinos, sirviendo de escudo y apoyo a las visilizaciones y denuncias de los diferentes atropellos/acosos de los derechos humanos que siguen siendo víctimas los campesinos mestizos, afros e indígenas por parte de los paramilitares, empresarios de las multinacionales y el ejército colombiano. La última en la que participaron  dos comuneras (Pili Gª y Toñi) fue en febrero de 2012.

Participación en actos con otros grupos. informando de lo que se ha podido verificar en las marchas acompañando a los campesinos.

Participación en acciones ante el Gobierno español para denunciar y exigir que tome una postura comprometida contra tanta injusticias del gobierno colombiano:

a) Reunión con el portavoz de Asuntos Exteriores de Izquieda Plural, J J.Nuet

b) Participación en una rueda de prensa en una sala del Congreso

c) Hacer al Congreso una pregunta parlamentaria sobre los controles que hace el gobierno español sobre el respeto a los derechos humanos tanto a las empresas españolas como al gobierno colombiano.

Solicitar y participar en una entrevista en la Embajada de Colombia con el ministro plenipotenciario para informar y denunciar el acoso a los campesinos , la muerte de dos de ellos (padre e hijo) y las amenazas a los miembros de Justicia y Paz,

Apoyar las demandas de la plataforma de movimientos sociales de Colombia para exigir “Una paz con justicia” por medio de una carta dirigida al Presidente Santos,firmada por los miembros de la Comisión Ética.

Tierra y semillas. Ofrezco esta tierra y estas semillas como símbolo de esperanza de paz del pueblo colombiano, con el deseo de que todos los trabajos y luchas de las comunidades campesinas  germinen en una paz con justicia y que si esta utopía no se cumple en su integridad rebrote, de nuevo, la llama de la esperanza.

–        Propiedad ancestral (cuadro)  “Es para mí un honor estar en esta celebración y poder contaros lo que significa en este momento de mi vida la realización de la obra que, como sabéis, titulo PROPIEDAD ANCESTRAL y que tan buena acogida ha tenido por vuestra parte, lo que os agradezco profundamente.

Quizás sea, en la actualidad, la pintura uno de los medios donde me expreso con más intensidad porque el arte para mí, está muy cerca de la esencia, de lo espiritual, de lo que soy y de lo que quiero conquistar como ser humano. Es una aventura existencial que me planteo como un proceso, dándole importancia a cada paso, valorando cada logro de una etapa y siendo consciente de que ello enriquece las realizaciones siguientes.

En esta obra he buscado, con la mayor libertad, integrar la técnica, el color y sobre todo el fondo, el tema, el motivo… para intentar dar coherencia al conjunto. Esta apasionante actividad me ha llevado a reflexionar no sólo sobre la estética, sino también sobre la filosofía, la vida, lo religioso y lo más evidente en ella, la necesidad de justicia.

¿Por qué se me ocurrió este tema? Está claro que llevo años escuchando a Pilar, Andrés, Yago, Rocío y últimamente a Toñi y a Pili, contándonos una y otra vez las injusticias que sufren los campesinos colombianos en sus tierras, cómo defienden sus derechos dando incluso sus vidas. ¿Cómo no conmoverme? ¿Cómo no correr la voz? ¿Cómo no participar poniendo mi granito de arena para que todos se enteren? Pienso que el arte no debe ser sólo estética sino que, éste para que lo sea, debe contribuir de alguna forma a que las cosas cambien y el mundo y los seres que lo habitan lo hagan con dignidad.

¿El cuadro? La casa de Pedro, su cartel reivindicativo, algunas letras “rojas como la sangre”, el interior y el exterior: cómo se vive dentro y cómo se ve desde fuera. ¿Qué hacemos ahora?” CONCHA TEJEDA

Colecta  (Música)

Pan y vino

Invitación a la Comunidad para otras ofrendas.

ANÁFORA “ Esperar en medio de la incertidumbre”

L1.- Te bendecimos Padre por Jesús, tu hijo, que es para nosotros el principio de toda esperanza. Confiados en su palabra y su testimonio de vida, celebramos hoy la esperanza de paz que mantiene en vilo a nuestros hermanos de las comunidades campesinas colombianas que a lo largo de varias décadas han sufrido ultrajes, asesinatos, desplazamientos y destrucción de sus culturas.

TODOS.- Te alabamos y te bendecimos porque entendemos que el Proceso de Paz que se desarrolla en estos momentos en La Habana es un resplandor de vida que ilumina el desolado corazón de un pueblo doliente. ¿Cómo no ver en él la huella de tu Espíritu, de tu bondad y tu amor?

L2.- Con todo, no podemos alejar de nosotros la sombra de la duda y la cautela.  Pues, a pesar de esos Diálogos de paz, en Colombia continúa vigente la crisis humanitaria y de violencia abierta: ataques directos a defensores de derechos humanos, como en el caso de nuestro amigo, el padre Alberto Franco; nuevos asesinatos y ejecuciones extrajudiciales…etc. Sólo en este mes de enero se han registrado 474 desapariciones.

L.3.- ¿Cómo mantener viva la esperanza en la paz, en un contexto social y político como éste?  Durante décadas,  la violación cotidiana de los derechos humanos y el estado de impunidad prolongado ha minado las esperanzas de ver respetada la dignidad humana de los pobres y los disconformes.

L4.- Desde el dolor de tantas cruces como hoy decoran las aldeas de las comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes, nos reunimos en torno a la mesa de la fraternidad universal para afirmar con ellos la fe en los procesos de resurrección, de amor por la vida, que surgen por doquier y, reconociendo en ellos el influjo de tu espíritu de verdad y de vida, te cantamos:

SANTO, Santo, Santo…… (Misa nicaragüense)

L.5.- Acabamos de leer que la esperanza en la paz y la justicia integral no parecen posibles si mantenemos una idea de la esperanza demasiado ligada la recompensa, pues el éxito con frecuencia es fruto de la injusticia. Los cristianos sabemos bien dónde buscar el hontanar de la esperanza. ¿Acaso no pareció un fracaso la muerte de Jesús en la cruz? ¿No aceptó Jesús morir en medio del abandono antes que traicionar los valores por los cuales se jugó la vida?

L.6.- De la cruz de Jesús hemos aprendido que la esperanza cristiana es una adhesión existencial a utopías y proyectos de liberación que tienen valor por sí mismos, y que pueden convivir perfectamente con el fracaso, sin por ello quedar destruida.

TODOS .- Danos valor, Padre, para hacer frente a las situaciones de injusticia que nos participan tantos hermanos privados de dignidad y de futuro, y danos fortaleza para consolidar nuestra esperanza en medio de cualquier adversidad.

L.7.- Al anunciarnos tu Reino, como utopía presente y futura, Jesús, tu hijo,  nos enseña a creer y confiar en Ti, y a saber esperar, incluso en medio del fracaso.  Lo hizo con su palabra y, sobre todo, con el ejemplo de su vida, siendo fiel hasta el final, hasta la entrega total que celebramos en este memorial de muerte y resurrección que alimenta nuestra esperanza.

TODOS: Envía, Padre, sobre nosotros tu espíritu para que se haga realidad en estos días el gesto de Jesús, cuando en la última cena, tomó el pan y dando gracias, lo partió y lo repartió entre sus discípulos diciendo: TOMAD Y COMED. ESTO ES MI CUERPO.

L.8.- Del mismo modo, al final de la cena, tomó la copa, la bendijo y la pasó a sus amigos, diciendo:

TODOS: TOMAD Y BEBED. ESTE ES EL CALIZ DE MI SANGRE QUE ENTREGA PARA QUE TODOS CREAN EN EL AMOR Y EN LA VIDA. HACED ESTO EN MEMORIA MIA

L.9.-Este es el Sacramento de nuestra fe.

TODOS: Anunciamos tu muerte; proclamamos tu resurrección. Ven, Señor Jesús L.9.- Recordando su vida y su muerte, recordamos también las claves que nos dio para esperar y seguir caminando. Nosotros esperamos una realidad mejor, y luchamos por ella. Pero el cansancio en la espera nos hace mella.

L.10.- Necesitamos hacer realidad aquellas palabras de E. Fromm: “Tener esperanza significa estar atento y diligente para lo que aún no acaba de nacer o de llegar, pero sin desesperar si lo que se espera no ocurre en el lapso de nuestra vida.”

TODOS.- Fortalece, Señor, nuestra confianza en la implantación real de tu Reino. Y haznos también portadores de esa esperanza ante  quienes van por la vida con la lámpara de la esperanza débil o vacilante.

L.12.- Invocamos tu Espíritu sobre el Proceso de paz de Colombia a fin de que, con la participación de todos, sea posible una solución política negociada al conflicto social,  que  genere paz justa e incluyente para las grandes mayorías que hoy todavía viven  excluidas del desarrollo humano fundamental. Esta es la esperanza del pueblo.

L. 14.- Y a nosotros, Padre, concédenos el aliento renovado para reforzar el compromiso de la solidaridad con las víctimas, y la esperanza fuerte que nace de la búsqueda de justicia, aunque hayamos de pasar a veces  por las sombras de la incertidumbre o la noche oscura de la  desesperanza.

L.15.-Que el Espíritu de Jesús, en cuyo nombre nos unimos a los hermanos colombianos,  nos acompañe siempre y fortalezca nuestra esperanza.

Por Cristo, con Él y en Él…..

Padrenuestro y Paz

Comunión Música: “Benedictus” de The armend man.

ACCIÓN DE GRACIAS

Esta Acción de Gracias va dirigida a nuestros hermanos y hermanas de las comunidades desplazadas en Colombia.

Desde esta nuestra realidad, tan lejana a la vuestra en la distancia, pero tan cercana y compartida en el corazón,

Recordamos con gratitud vuestro ejemplo de libertad y fortaleza durante todos estos años de miedo y opresión.

Vuestra resistencia y dignidad frente a tanta injusticia, humillación y muerte,

Y sobre todo, vuestra esperanza, aún contra toda esperanza, que os permite seguir soñando y trabajando por la reconstrucción de vuestras vidas.

Os reconocemos como gentes de paz.Trabajáis y peleáis hasta el final para que se haga justicia. Inculcáis estos valores a vuestros hijos, pero no les educáis en el odio y el rencor.

Envidiamos vuestro espíritu comunitario. La hospitalidad con que recibís a propios y a extraños. Y esa sabiduría natural que transmitís y que sin duda nace de vuestra sencillez y coherencia.

Admiramos también profundamente que pese a tanto dolor sufrido, vuestro corazón sea capaz de dejar una vía libre a la alegría y a la fiesta.

Por todo ello y porque vuestro testimonio es para nosotros Buena Nueva, mensaje que nos mueve al compromiso y a la esperanza,

Os damos gracias de corazón

(Nota: El cuadro de Conchita presidirá la Celebración y se colocara al lado de la vitrina de las víctimas)