Celebración: Las mujeres en la Iglesia. 18 de junio del 2023
La mesa se pone en el centro y la gente alrededor formando un círculo grande. La mesa está vestida con manteles o telas vistosas y coloridas, velas, flores y hojas de hiedra, botella de vino, cuencos con hojas de hierbaluisa, con frutos secos…
Repartimos unas hojas de Hierbaluisa: es una planta con un aroma a limón y una infinidad de beneficios para la salud por su efecto sedante que reduce la ansiedad y el estrés y muy apropiada para mejorar la digestión.
Saludo y presentación de la celebración: Hemos cuidado esta celebración en la que tendremos oración, canciones, bailes, lecturas de la palabra y reflexión de toda la comunidad.
Sobre la mesa hay:
– Telas diferentes, de colores vivos, estampados…expresan la diversidad que somos, la diversidad de dones de la comunidad
– Velas que expresan la Luz y el Fuego que vienen del Espíritu, que nos ilumina y nos abrasa para transformarnos y transformar el mundo.
– La Biblia que nos interpela y nos habla directamente, una de las principales formas de comunicación de Dios con nosotras.
– Las flores y plantas que expresan la belleza y nos recuerdan la naturaleza que debemos proteger y cuidar.
– Vino y frutos secos que compartiremos y que nos dan fuerza para estar siempre en camino.
Canción: Ruah ¡Alégrate! con imágenes y letra de la canción
Invitamos a ponernos de pie y en el sitio balancearse, activar energías y balancearnos
Ruah, Ruah, Aliento de Dios en nosotras Pinchar en la imagen
Ruah, Ruah, Espíritu
Rito de la crema: que suaviza y abre los poros para estar alerta (nos vamos poniendo crema en las manos unos a otros)
Oración: (Dolores Alexandre).
Todos
Que el Señor nos conceda la audacia de Devora, y la valentía de Esther y de Judith, que nos colme de alegría como a Ana, y de lealtad y de amor fiel como a Ruth.
Que podamos cantar y danzar junto al mar como María la profetisa, y que con María de Nazaret proclamemos la grandeza del Señor, en el triunfo de los hambrientos y de los humildes.
Que lleguemos a encontrarnos con Jesús el Señor, como lo encontraron María Magdalena, y Marta y Salomé y La Samaritana, y Él les devolvió la dignidad y la libertad, y les dio un nombre nuevo.
Y que como aquella mujer encorvada a la que él se acercó y enderezó, podamos todos vivir erguidos y ayudar a enderezarse a otros, porque esa mujer, nosotros, todos, mujeres y hombres, estamos llamados a ponernos en pie y a glorificar a Dios.
Que así sea.
Lecturas:
1ª Lectura Hablar a Dios sin intermediarios.
Margarita Porete nace en Francia en 1250 y muere en la hoguera el primero de Junio de 1310.Fue una mujer mística fundadora de la corriente de las beguinas, es autora del libro El espejo de las almas simples, que trata a cerca de la mística cristiana centrado en la noción del Amor Divino.
Tras un largo juicio, por expandir sus ideas trasgresoras a cerca de la relación mística directa y sin intermediación con Dios y haberse negado a retirar el libro de circulación y renunciar a sus ideas, fue quemada en la hoguera.
Hablar a Dios sin intermediarios
Las beguinas constituyeron un movimiento religioso y místico de mujeres en el siglo XIII, no sujeto a ninguna regla o institución de La Iglesia. Se agruparon de modo libre, sin desafiar a nada ni a nadie. Estaba constituido por mujeres que buscaban un camino independiente para su espiritualidad. Algunas, como Margarita Porete, crearon libros de alta calidad espiritualidad y literaria, con sencillas y comprensibles normas para vivir de modo independiente las inquietudes religiosas. El libro de Margarita Porete, escrito en lengua romance, fue rápidamente editado y traducido a varios idiomas, convirtiéndose rápidamente en un “best seller” de la época. Todo esto llamó la atención de La Iglesia, su calificación como hereje, y su sometimiento a la jurisdicción de La Inquisición. El único libro que perduró, fue: “El espejo de las almas simples”, cuyos ejemplares fueron quemados en 1306 por el obispo de la jurisdicción de Cambrai. En 1309 se inició el proceso inquisitorial contra Margarita Porete, que fue quemada viva el 1 de junio de 1310, en la ciudad de Paris. En todo momento, Margarita, se negó a declarar ante el Tribunal de La Inquisición.
La propuesta de las beguinas, inadmisible para La Iglesia, era que la experiencia religiosa y mística se originaba en la experiencia vital, y no en el conocimiento teórico. A Dios se llega por la experiencia y no por los libros. Es una propuesta sorprendentemente actual, pero realizada en el siglo XIII. Era la propuesta del alma libre: “La que es así, escribía Margarita Porete, ya no busca a Dios por la penitencia, ni a través de ningún sacramento de La Santa Iglesia, ni por pensamientos, palabras u obras, ni a través de criatura terrestre o celeste, ni por justicia o misericordia, ni por conocimiento divino, ni por divino amor, ni divino loor”.
El espejo de las almas simples, dice:
Teólogos y otros clérigos no tendréis el entendimiento por claro que sea vuestro ingenio
a no ser que procedáis humildemente y que amor y fe juntas os hagan superar la razón,
pues son ellas las damas de la casa.
Semejante afirmación era demasiado para la Santa Iglesia. Hay que decir que las beguinas no rechazaban su autoridad, ni suponía desafío alguno para ella, pero iniciaban un camino de libertad, que sólo podía ser erradicado con la hoguera, con las santas llamas. El movimiento fue declarado herético, otros nombres ilustres de beguinas sufrieron las prisiones inquisitoriales, aunque solo Porete, la más emblemática, fue entregada a “la relajación por el brazo secular”.
2ª Lectura Evangelio: Lucas 13, 10-14: “Había allí una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin poder enderezarse del todo. Jesús, al verla, la llamó y le dijo: «Mujer, estás curada de tu enfermedad» y le aplicó las manos. En el acto se puso derecha y empezó a alabar a Dios. Intervino el jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado”.
Reflexión. La escena transcurre un sábado en la Sinagoga, en un lugar y en un día sagrado. La mujer que aparece era conocida por todos, pero su situación de debilidad era ignorada. Su presencia silenciosa, sin embargo, no pasa desapercibida para Jesús. Hay cuatro acciones: Él la ve, la llama, le habla, y le impone las manos. Jesús no hace nada particular, tan solo la trata y la considera en su dignidad propia, porque él la ve, aunque para otros era invisible; él la llama y le habla, es decir le dirige la palabra porque ve en ella la singularidad de un ser capaz de responder. Y Él finalmente le impone las manos, gesto de protección y señal de sanación de todo el dolor que ha significado para esta mujer su postergación. El jefe de la sinagoga sigue sin ver a la mujer, sin reconocer su transformación. Sólo se indigna porque la Ley, está siendo transgredida.
Trayendo al momento actual esta lectura podemos ver que la espalda doblada de aquella mujer es la imagen de todas las cargas, de todas las opresiones, de todas las humillaciones y sometimientos que viven tantas mujeres en el mundo. Es el símbolo de la imposibilidad de mirar a los otros de frente, de dirigirse a ellos como a un igual, de entablar una relación de reciprocidad. Por eso, el gesto de Jesús y sus palabras estallaron con una fuerza insólita de liberación y de restablecimiento de dignidad para aquella mujer y para tantas otras.
Reflexiones de la comunidad
Canción: Mujeres en camino (Ain Karim). Pinchar en la imagen
(Se forman dos círculos, un círculo se mueve hacia la derecha y el otro hacia la izquierda, nos vamos dando las manos, entrecruzándonos haciendo «ochos»).
–Bendición: Vamos a recordar mujeres de la Biblia y a pedir que a través de ellas nos venga la bendición (extendemos las manos y decimos)
Todos. Que nos bendiga el Dios de Devora, que prometió justicia a su pueblo, que nos bendiga el Señor que se le apareció a María Magdalena, que nos bendiga la Ruah (el Espíritu) que alienta nuestra comunidad.
–Rito de despedida: Compartimos un vino y unos frutos secos que nos llenan de energía para el camino y poder llegar a hacer realidad esa iglesia querida y vislumbrada entre todos.