Amar en tiempos de pandemia                            Celebración 7 de febrero 2021   

Presentación. El tema que planteamos (Amar en tiempos de pandemia) surgió a partir de los acontecimientos que vivimos en el mes de enero de 2021, a raíz de las movilizaciones de los seguidores de Trump y la toma del Congreso de los EE.UU. Enseguida vimos que se trata de un movimiento social más amplio que tiene bastantes puntos en común con partidos de extrema derecha en Europa o con Vox en España…: autodefensa de lo que es mío, mi trabajo, mi propiedad, mi país, mi nación, mis costumbres, mi forma de entender la familia y la relación entre hombres y mujeres, en definitiva, lo mío y los míos frente a los otros, los inmigrantes, los racialmente distintos, los que piensan diferente.

Vimos también que crece la desconfianza hacia las instituciones, que los partidos políticos se enfrentan aquí en España, con y sin pandemia, en un teatro de permanente confrontación, y que surgen también modelos alternativos de sociedad que enseguida son tachados de antisistema, comunistas, bolivarianos, etc.

¿Cómo situarnos en este contexto?, ¿Desde qué claves podemos comprender lo que está pasando y aportar nuestro granito de arena? Nos agarramos entonces como a un clavo ardiendo al mensaje del amor, que es la clave de bóveda del mensaje de Jesús: compartir frente a segregar; liberar frente a dominar; confiar frente a desconfiar; construir puentes y eliminar fronteras; redistribuir los bienes frente a acapararlos; defender lo común frente a lo privado; ser activos en defensa de la justicia, de la población excluida, y no pasivos frente a las situaciones de opresión cultural, explotación laboral y desigualdad social que prevalecen en el mundo actual. Nos preguntamos si estas claves del Evangelio nos pueden ayudar a comprender lo que pasa y a situarnos en el punto adecuado para mejorar las cosas.

  • Oración de Perdón
  • Señor te pedimos perdón por las veces en que no tomamos en serio la desigualdad de oportunidades que existe entre las personas: desigualdad económica, educacional, ambiental, etc.
  • Perdónanos por acomodarnos en nuestro «estado del bienestar», sin pensar en la cantidad de hermanos que están muy lejos de dicho bienestar.

Lecturas

De Fratelli tutti En estos fragmentos de la Fratelli Tutti, papa Francisco resalta la importancia de impregnar nuestra actuación en favor de los demás con el amor y más aún con la ternura

También en la política hay lugar para amar con ternura. «¿Qué es la ternura? Es el amor que se hace cercano y concreto. Es un movimiento que procede del corazón y llega a los ojos, a los oídos, a las manos. […] La ternura es el camino que han recorrido los hombres y las mujeres más valientes y fuertes». En medio de la actividad política, “los más pequeños, los más débiles, los más pobres deben enternecernos: tienen “derecho” de llenarnos el alma y el corazón. Sí, ellos son nuestros hermanos y como tales tenemos que amarlos y tratarlos».

Esto nos ayuda a reconocer que no siempre se trata de lograr grandes éxitos, que a veces no son posibles. En la actividad política hay que recordar que «más allá de toda apariencia, cada uno es inmensamente sagrado y merece nuestro cariño y nuestra entrega. Por ello, si logro ayudar a una sola persona a vivir mejor, eso ya justifica la entrega de mi vida. Es lindo ser pueblo fiel de Dios. ¡Y alcanzamos plenitud cuando rompemos las paredes y el corazón se nos llena de rostros y de nombres!».  Los grandes objetivos soñados en las estrategias se logran parcialmente. Más allá de esto, quien ama y ha dejado de entender la política como una mera búsqueda de poder «tiene la seguridad de que no se pierde ninguno de sus trabajos realizados con amor, no se pierde ninguna de sus preocupaciones sinceras por los demás, no se pierde ningún acto de amor a Dios, no se pierde ningún cansancio generoso, no se pierde ninguna dolorosa paciencia. Todo eso da vueltas por el mundo como una fuerza de vida».

Del Evangelio Lc. 10, 25-37. El fragmento de Lucas del buen samaritano nos aclara que el amor debe superar al simple cuidado

Un maestro de la Ley se levantó y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: “Maestro, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?”. Jesús le preguntó a su vez: “Qué está escrito en la Ley?, ¿qué lees en ella?”. Él le respondió: “Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente, y al prójimo como a ti mismo”. Entonces Jesús le dijo: “Has respondido bien; pero ahora practícalo y vivirás”. El maestro de la Ley, queriendo justificarse, le volvió a preguntar: “¿Quién es mi prójimo?”. Jesús tomó la palabra y dijo: “Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, quienes, después de despojarlo de todo y herirlo, se fueron, dejándolo por muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por el mismo camino, lo vio, dio un rodeo y pasó de largo. Igual hizo un levita, que llegó al mismo lugar, dio un rodeo y pasó de largo. En cambio, un samaritano, que iba de viaje, llegó a donde estaba el hombre herido y, al verlo, se conmovió profundamente, se acercó y le vendó sus heridas, curándolas con aceite y vino. Después lo cargó sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un albergue y se quedó cuidándolo. A la mañana siguiente le dio al dueño del albergue dos monedas de plata y le dijo: ‘Cuídalo, y, si gastas de más, te lo pagaré a mi regreso’. ¿Cuál de estos tres te parece que se comportó como prójimo del hombre que cayó en manos de los ladrones?” El maestro de la Ley respondió: “El que lo trató con misericordia”. Entonces Jesús le dijo: “Tienes que ir y hacer lo mismo» (Lc. 10,25-37).

Música                                                 Bread & Roses (fragmento)

Motivación a la reflexión. Durante estos largos meses de pandemia, la situación de los más vulnerables, inmigrantes sin papeles, familias monoparentales sin recursos, minorías étnicas…se empeora de una forma catastrófica. Si antes eran invisibles, ahora es como si no existieran. El debate de los políticos se centra en los de casa.

Nos sentimos vulnerables, en peligro. Y surgen los políticos que utilizan el miedo de la población para remover y justificar el discurso del odio: al extranjero, al pobre… Se desvalora y se difama a quien tiene ideas diferentes, al que es de otra raza, de otra cultura o religión… Y es difícil no entrar en ese debate demoledor.

Hemos elegido dos textos que nos pueden ayudar a situarnos de otra manera. Jesús nos ofrece una mirada desde la compasión: un samaritano que actúa sin dudar para socorrer a alguien que se encontró herido en el camino.

Francisco en la encíclica nos habla de que es posible amar con ternura incluso en la política.

Desde los límites que nos pone el confinamiento, es posible en estos tiempos de catástrofe amar con ternura? Cómo nos situamos para que los débiles y los  pobres nos enternezcan?

Reflexión Comunitaria

Ofrendas  pinchar en el enlace                 

Anáfora. Tras la reflexión y los buenos deseos formulados, pasamos a la acción pacífica de Dios que supera todo conocimiento, que custodia nuestros corazones y nuestros pensamientos.

Enraizados en la fé de nuestros antepasados, bendice Señor este pan y este vino, símbolo de nuestros compromisos y haz que reparen nuestras fuerzas para mejor servir y amar.

Anáfora  (Pinchar para ver y descargar powerpoint)

Música                                     Hacedlo en memoria mía(fragmento)

Oración. Recordamos y tenemos presentes en nuestro altar virtual a personas queridas que no están aquí, a aquellos que nos dan ejemplo de amor en la acogida e integración de los que vienen y también a los que murieron en la búsqueda de un mundo mejor.

Padre Nuestro. Jesús nos enseñó la manera de dirigirnos al Padre. Os invitamos a unir nuestras manos y hacer juntos la oración del Padre nuestro.

Paz. Y reconociéndonos como hermanos, nos deseamos la paz unos a otros.

Comunión: Compartir el pan y el vino no es algo banal, es un compromiso, es compartir nuestra vida y ponerla al servicio de los demás. Y ponerla con amor. Con este sentido, nos atrevemos a comer el pan y beber el vino como hizo Jesús en su última noche con sus amigos.

Acción de Gracias. Después de nuestra celebración inspirada en el ejemplo que tú nos diste Señor, te damos gracias porque nos das fuerza para amar más, perdonar más y en consecuencia para ayudar a quien nos necesita y así salir mejores personas de esta Pandemia

Avisos