Te damos gracias, Señor, por la labor con que todas las colaboradoras de KARIBU contribuyen al éxito de la inculturación de las emigrantes africanas que acogemos fraternalmente.

En este año de muertes, estamos vivos.

En este año de enfermedades estamos sanos.

En este año de escaseces hemos sido bendecidos con pan en nuestras mesas.

En este año de caídas y flaquezas estamos de pié.

En este año de temores y miedos estamos confiados en tu gracia.

En este año de desastres nos sentimos acompañados.

Este año ha sido inusual, confiamos en Ti, Señor.

Cuando todo el mundo parece ir a la deriva, nuestra barca sigue aún su camino y no se ha hundido, y por supuesto no ha sido por nuestras fuerzas, sino solamente por tu gracia.

Gracias Señor Dios porque en este nuevo año seguimos aquí, de pié con salud y con toda la fe en que juntos saldremos adelante.

Aitor